En medio de la crisis que arrecia en la Policía Nacional, el Congreso Nacional aprobó ayer en primer debate la constitución de la Tropa de Inteligencia y Grupos de Respuesta Especial de Seguridad (Tigres).
Dicha fuerza policial estará adscrita a la Secretaría de Seguridad.
El proyecto fue introducido hace varios meses por Juan Orlando Hernández, presidente del Congreso Nacional, y dictaminado por la comisión de seguridad del Legislativo, dirigida por el diputado Mario Pérez.
Tigres será un comando armado con formación, entrenamiento, escalafón y disciplina, especializado en el combate contra el crimen.
El decreto de la creación de esta fuerza consta de 47 artículos, en los que se establece su conformación y su operatividad al mando del presidente de la República y del ministro de Seguridad. En situaciones de guerra, el instituto armado pasará al mando de la Secretaría de Defensa, previa autorización del Congreso Nacional.
Pruebas de confianza
De acuerdo con el titular del Legislativo, los miembros de esta Policía tendrán que pasar cinco pruebas de confianza: de polígrafo, toxicológica, psicométrica, patrimonial y de buen desempeño.
Según su criterio, los policías, una vez certificados, podrán ser miembros de la fuerza Tigres, así como los elementos que pudieran venir de las Fuerzas Armadas, pero antes deberán ser entrenados como policías. “Necesitamos una fuerza policial con capacidades diferentes a las que tenemos y esto significa capacidades no únicamente en la formación, sino en equipamiento.
Una fuerza de reacción rápida, con información, inteligencia y uso de tecnología de primera generación”, señaló.
“Creemos que este es un instrumento importante que le va ayudar al país a resolver el problema de inseguridad. Esta nueva fuerza policial nos ayudará extraordinariamente. Tigres hará investigación criminal, hará inteligencia y otros trabajos especiales”, dijo el presidente del Legislativo.
Fondos
Según él, los recursos para la capacitación y la entrada en operación de Tigres saldrían de la tasa de seguridad, de apoyo internacional y de los recursos que ahorre la Secretaría de Seguridad por los policías depurados. Hernández sostuvo que esta fuerza policial podría contar con 400 agentes.
De acuerdo con el diputado Pérez, el dictamen se trabajó con la Secretaría de Seguridad, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. “Esta tropa que se crearía, si es que se aprueba este proyecto de ley, va a tener una formación especial. Es una combinación de la disciplina militar con las capacidades de un policía para investigar”, añadió.
“Hay que quitarnos de la cabeza que estamos creando una Policía paralela, que le estamos quitando funciones y atribuciones que ya le competen a la Policía Nacional.
Por eso reitero que es un órgano de la Secretaría de Seguridad bajo el mando directo del ministro de Seguridad y del presidente de la República para cumplir tareas y asignaciones especiales”.
Aunque Tigres será una fuerza con las mismas labores que ejecutan los agentes de la Dirección General de Servicios Especiales de Investigación y de la Policía de Fronteras, el dictaminador asegura que lo que se está buscando con ello es “tener otras opciones, otras alternativas en materia de seguridad.
Si lo que tenemos en este momento no nos está dando los resultados que queremos, hay que buscar otras opciones. De lo contrario vamos a seguir obteniendo los mismos resultados”, justificó el diputado Pérez.