Por unanimidad de votos de todas las bancadas este martes el Congreso Nacional aprobó la renuncia del exsecretario Carlos Zelaya, luego de escándalo por la publicación del video donde aparece con personajes ligados al narcotráfico.
La dimisión del excongresista Carlos Zelaya ingresó a la cámara legislativa como correspondencia el lunes 16 de septiembre, tras no recibir ninguna resolución por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE).
“Me presenté ante el Consejo Nacional Electoral a presentar mi renuncia por causas estrictamente personales al cargo de diputados propietario por el departamento de Olancho al cual fui electo, sin embargo, el pleno de ese órgano electoral aún no se pronuncia respecto a mi renuncia”, cita parte de la renuncia.
Continúa: “Mi renuncia por causas estrictamente personales al cargo de diputado propietario por el departamento de Olancho y se ha sometido a su aceptación sin otra particular me suscribo de usted no sin antes reiterarle mis muestras más altas de consideración y estima atentamente Carlos Armando Zelaya Rosales diputado propietario por el departamento de Olancho 4”.
El pasado 31 de agosto el exsecretario del CN y cuñado de la presidenta Xiomara Castro, anunció su dimisión al Poder Legislativo tras salir de audiencia del Ministerio Público.
Escándalo por el narcovideo
Carlos Zelaya se vio obligado a renunciar como diputado y secretario del Parlamento hondureño después de haber admitido el pasado 31 de agosto que en 2013 se reunió con narcotraficantes hondureños que le ofrecieron dinero para la campaña del ahora gobernante Partido Libertad y Refundación (Libre).
El escándalo por el narcovideo también provocó la renuncia de su hijo José Manuel Zelaya como ministro de Defensa, quien fue sustituido por Rixi Moncada, exministra de Finanzas y precandidata presidencial del Partido Libre.
El 3 de septiembre, la ONG estadounidense InSight Crime divulgó un video que muestra a narcotraficantes hondureños negociando un soborno de hasta 650.000 dólares al partido Libre, a lo que Carlos Zelaya responde que “la mitad es para el comandante”, refiriéndose al expresidente Zelaya.
Tres días después, la presidenta Xiomara Castro condenó el “error deplorable” de su cuñado por reunirse con narcotraficantes y denunció que se estaba gestando un golpe de Estado en su contra.
El narcovideo ha sido condenado y repudiado por los hondureños, quienes exigen la renuncia de la presidenta y la restitución del tratado de extradición bilateral con EE.UU., dado por terminado el 28 de agosto por supuestas injerencias de la embajadora estadounidense, Laura Dogu, por criticar una reunión de autoridades de Honduras con el sancionado ministro venezolano de Defensa, Vladimir Padrino López.
Analistas y políticos creen que Castro puso fin al acuerdo de extradición con EE.UU. para proteger a familiares o altos funcionarios, porque tres días después su cuñado admitió haberse reunido con narcotraficantes. EFE