Preocupa el incremento de niños quemados en Honduras, pues un total de 58 menores de edad han ingresado a la sala de emergencia del Centro Hondureño para el Niño Quemado (Cehniq) por graves quemaduras en lo que va el 2023.
El derrame de líquidos calientes en su cuerpo es el principal motivo por lo que, de uno a tres niños promedio, ingresan diariamente al centro asistencial.
De acuerdo a los datos de Cehniq, solo siete menores han ingresado a la entidad de manera ambulatoria, es decir, con lesiones de menor gravedad por lo que no fueron hospitalizados; el resto sí.
Un total de 46 niños fueron referidos de varios centros hospitalarios del país, mientras que el resto llegó directamente al centro que administra la Fundación por la Vida del Niño Quemado (Fundaniquem).
El departamento en que más casos se registran es Francisco Morazán con el 46%, seguido de Olancho con el 15% y el 39% restante se distribuye en 16 departamentos de Honduras, según cifras de Cehniq.
“Si nos referimos al lugar más frecuente donde ocurren las quemaduras en menores de edad, la cocina de los hogares hondureños es el sitio donde los niños sufren lesiones en su piel, y la negligencia de los padres o tutores figura entre los motivos colaterales para que los infantes se vean expuestos a este tipo de incidentes”, manifestaron las autoridades.
Agregaron que las causas de quemaduras en menores de edad aparecen la flama o llamas como segundo lugar, y contacto con objetos, pólvora y la electricidad se encuentran en tercer lugar.
Cabe destacar que los líquidos calientes son técnicamente conocidos como escaldadura: el agua hervida, las sopas en cocción, sopas instantáneas, aceite a temperatura de ebullición, café y leche caliente.
