Con una marcha a lo largo de la calle uno y la avenida San Isidro, ceibeños protestaron ayer por los constantes apagones que sufren a diario. Hay al menos dos interrupciones de energía eléctrica en la ciudad todos los días y se traducen en pérdidas para el sector empresarial y la población.
Dagoberto Tejeda, dirigente del Sindicato de Trabajadores de la Enee (Stenee), manifestó que la marcha sirvió también para pronunciarse contra la privatización de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee).
Reinaldo Escobar, ejecutivo de la Cámara de Comercio en La Ceiba, indicó que las pérdidas monetarias oscilan entre 5,000 lempiras en negocios pequeños y hasta 500 mil en establecimientos grandes.
Las pérdidas repercuten en la economía local porque se ahuyenta la inversión y disminuyen los clientes.
El área más afectada, de acuerdo con Escobar, es el entretenimiento nocturno. “Aún cuando los restaurantes cuenten con generadores de energía, el visitante se ahuyenta porque el camino a los lugares de diversión está en penumbras y prefieren no arriesgarse”, observó.
Al no contar con el servicio de energía eléctrica, los sistemas de pago de algunos establecimientos tienen problemas y eso se traduce en clientes perdidos. Además, los constantes apagones afectan la durabilidad de los aparatos que se utilizan a diario en el comercio, así como las comidas que requieren refrigeración, pues al estar expuestas al sofocante calor se descomponen.
“La falta de cumplimiento en los horarios de los cortes es otro factor que daña a los empresarios porque no encuentran la manera de prepararse antes de las interrupciones eléctricas”, sostuvo.
En la zona viva, donde predominan los restaurantes, bares y discotecas, los apagones generan pérdidas diarias en las ventas.
Respuestas
Luis Cano, jefe de distribución de la Enee, señaló que la demanda de energía eléctrica en La Ceiba excede la capacidad generada mediante la línea de transmisión.
“Los conductores de energía tienen una antigüedad de al menos 30 años y vienen desde El Progreso, Tela, pasan por La Ceiba y llegan al Bajo Aguán. Eso produce bajo voltaje”, detalló.
Agregó que se perjudican circuitos de diferentes ciudades, incluyendo La Ceiba.
