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Al batallón envían a extraditable Tokiro Rodas

  • 19 marzo 2022 /

Tokiro “El Perverso” Rodas, un líder de la Mara Salvatrucha (MS-13).

Tegucigalpa, Honduras

Un juez de primera instancia dictó este sábado arresto provisional luego de desarrollarse la primera audiencia informativa de extradición contra Tokiro “El Perverso” Rodas Ramírez, quien es solicitado por delitos relacionados con el crimen organizado.

Tokiro “El Perverso” Rodas, de origen salvadoreño, llegó vestido con la camiseta de un equipo de fútbol del país con la que andaba al momento de ser capturado en un partido de fútbol.

“El encausado es solicitado por la Corte Distrital de los Estados Unidos en el Distrito de Columbia, por delitos de crimen organizado”, informó el Poder Judicial de Honduras.

El juez natural designado para este caso convocó a las partes para el próximo 21 de abril a la segunda audiencia de extradición, donde se presentarán los medios de prueba por parte de Estados Unidos.

Durante este tiempo permanecerá con la medida de arresto provisional en Primer Batallón de Infantería de Tegucigalpa.

El líder de la Mara Salvatrucha (MS-13) acusado reclamado en Estados Unidos por “narcotráfico, lavado de activos y crimen organizado”, informó la Policía.

El presunto narcotraficante se identifica también como José Antonio Rodas Ramírez y Johnny Rodas Ramírez, de quien el gobierno hondureño tiene dos peticiones de extradición por parte de tribunales judiciales de Estados Unidos, señaló la Policía en un comunicado.

La orden de captura data del 20 de octubre del 2014 por delitos de narcotráfico y lavado de activos y otra del 2 de marzo por conspiración en crimen organizado.

Ramírez forma parte de un grupo de cinco líderes de la MS-13 señalados en 2011 por autoridades de Estados Unidos de dirigir -desde cárceles de El Salvador- extorsiones y delitos violentos en el área metropolitana de Washington.

La MS-13 y la pandillas Barrio 18, que cuentan con miles de miembros, flagelan con extorsiones, asesinatos y otros delitos en barriadas de Honduras, Guatemala y El Salvador. Su influencia llega hasta Estados Unidos, en una red de crimen transnacional que opera en algunos casos desde las cárceles.