Un grupo de 78 personas de nacionalidad nicaragüense, entre adultos y menores de edad, están varados al interior de la aduana El Florido, punto fronterizo entre Honduras y Guatemala, debido a las restricciones existentes por el COVID-19.
Los nicaragüenses se encuentran en la aduana desde el 18 de julio y están a la espera de que autoridades migratorias de su país los dejen ingresar para no seguir a la intemperie.
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En los últimos días, el Gobierno de Nicaragua informó acerca del establecimiento de condiciones para nacionales y extranjeros que ingresen a su territorio, entre estas, una prueba reciente de COVID-19 negativa como parte de su política sanitaria en medio de la pandemia.
![]() Honduras está a la espera de una respuesta por parte de Migración en Nicaragua.
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Lisandro Vallecillo, portavoz del Instituto Nacional de Migración (INM) en Tegucigalpa, aseguró que Honduras les ha facilitado toda la asistencia humanitaria y médica necesaria, además de la entrega de equipo de bioseguridad por el alto grado de vulnerabilidad.
Un llamado
'Ha existido un gran esfuerzo de apoyo por parte del Gobierno hondureño y la sociedad civil, pero ya a través de Migración en nuestro país se giró una comunicación oficial a las autoridades migratorias de Nicaragua para que realicen las gestiones correspondientes y así autoricen el ingreso de sus ciudadanos', manifestó el vocero de la entidad gubernamental.Desde su llegada a la aduana El Florido, el grupo de nicaragüenses ha estado en constante revisión médica, ya que 21 de ellos llegaron contagiados del COVID-19. En tanto, al resto se les ha estado practicando pruebas relacionadas con el virus para confirmar o descartar cualquier anticuerpo en su organismo.