Alrededor de 106 millones de dólares están disponibles de inmediato para el inicio de las obras preliminares de construcción de la nueva terminal aeroportuaria de Palmerola, cuyo contrato de concesión fue rubricado ayer por autoridades del Gobierno de Honduras, encabezadas por el presidente Juan Orlando Hernández, y la concesionaria Emco S.A de C.V.
La obra tiene una inversión global de 163 millones de dólares, de los cuales Emco aportará 87 millones y el Estado de Honduras 76 millones, que incluye una donación del Reino de España del programa de reconversión de deuda. De esa cifra, la concesionaria dispone de los primeros $30 millones, más la contraparte del Gobierno, informó Miguel Ángel Gámez, presidente de la Comisión para la Promoción de las Alianzas Público Privadas (Coalianza).
Dijo que las obras deberían comenzar en junio, pero la empresa ha prometido hacer un cierre financiero parcial y con esos 30 millones disponibles comenzar 30 días antes de lo programado.
Al final de la concesión de 30 años se proyecta que el aeropuerto manejará un tráfico de tres millones de pasajeros al año.
|
La rúbrica del contrato de diseño, construcción y operación de la nueva y moderna terminal aeroportuaria tuvo lugar en la base militar de Palmerola, justamente en el lado que ocupa la base aérea Enrique Soto Cano, y contó con la asistencia de empresarios, líderes comunales y religiosos, autoridades locales y funcionarios del Gobierno.
Carlos Miranda, alcalde de Comayagua, resaltó que con la firma e inicio de las obras en los próximos meses se hace realidad un sueño largamente acariciado por la población de esta ciudad colonial y sus municipios aledaños. “Palmerola le está dando a nuestro país la gran oportunidad de competir en materia aeroportuaria a nivel internacional, y a Comayagua le generará muchas oportunidades en materia de desarrollo económico, social y sobre todo la posibilidad de trascender las fronteras patrias porque va a tener conexión con todo el mundo”, acotó.
El alcalde resaltó que el municipio se ha venido preparando para recibir este importante proyecto, ya que se anticipó con un plan de ordenamiento territorial, de desarrollo urbano y de viabilidad que reglamenta la zona del aeropuerto para que ahí solo puedan edificarse edificios comerciales, bancos, hoteles, bodegas de carga y descarga y una área industrial, entre otras.
Jorge Romero, presidente de la Cámara de Comercio de Comayagua, expresó que las expectativas que genera Palmerola para el empresariado local son enormes, ya que se convierte en una plataforma de desarrollo y una ventana para atraer la inversión nacional y extranjera.
“Toda la economía local y regional se va a ver beneficiada porque va a haber mucha oferta de servicios locales, lo que va a generar mucho más empleo y fomentar el emprendimiento”, dijo.
Alberto Solórzano, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras, destacó que el país ya necesitaba un aeropuerto de esta magnitud que viene a sumarse a una propuesta de carácter nacional en materia de nuevas inversiones.
Eje logístico
En su discurso, el presidente Hernández resaltó que el nuevo aeropuerto es uno de los ejes de la estrategia de convertir a Honduras en el centro logístico de las Américas y se sumará a otros ejes de desarrollo como Puerto Cortés, el Corredor Logístico, el Corredor Agrícola y el Corredor del Pacífico.
“Este es un parteaguas en la historia de Honduras. Habrá un antes y un después”, dijo.
En el evento, el gobernante anunció el lanzamiento del plan maestro para garantizar el potencial agroalimentario del valle de Comayagua en armonía con el impacto positivo que traerá el nuevo aeropuerto, el cual será liderado por el ministro Jorge Ramón Hernández Alcerro.
Lenir Pérez, presidente ejecutivo de Emco, informó que Palmerola operará las 24 horas sin restricciones de horarios, estará certificado bajo la norma Iata-C, que es una certificación triple A de todos los aeropuertos del mundo y permitirá el aterrizaje de aviones de gran envergadura como el Boeing 777-200 hasta aeroplanos de bajo peso. Además resaltó que será operado por el aeropuerto de Munich, uno de los mejores de Europa y el número cinco a nivel mundial con un tráfico de 41 millones de pasajeros al año.