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Masaya, en pie de guerra contra el régimen de Daniel Ortega
Suman unas 130 muertes en las violentas protestas en Nicaragua.
- 06 junio 2018 /
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1 / 13En las últimas semanas la ciudad de Masaya se ha convertido en el bastión de la rebelión contra Daniel Ortega en Nicaragua.
La que una vez fuera la cuna del sandinismo se ha levantado contra el Gobierno protagonizando sangrientos enfrentamientos contra las fuerzas de represión de Ortega. -
2 / 13En medio de tañidos de campanas, detonaciones de morteros caseros y disparos de fusil, vecinos de Masaya revelaron en las redes sociales que drones y una avioneta sobrevuelan la localidad. -
3 / 13Anoche, un grupo de manifestantes capturaron a varios policías y los trasladaron a la iglesia de San Miguel en Masaya.
'¡Tenemos a dos! Vamos para allá'. Ese es el aviso. Una vocecita al otro lado del teléfono advierte que llevan hacia la iglesia San Miguel a dos policías, puede que antimotines. Son los 'infiltrados'. Aquellos contra los que el pueblo ha organizado barricadas para 'cazarlos'. No son bienvenidos.
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4 / 13Minutos después llega un chico joven en bicicleta y da el último aviso. Por la esquina se acercan dos hombres con un 'prisionero'. Lo han interceptado en Nindirí, a la entrada de Masaya, intentando pasarse por un civil. Su camiseta ensangrentada y su cara magullada son señales de una paliza. -
5 / 13'Parece una ciudad en guerra. Hay un dolor muy grande contra el gobierno y la policía por todo lo que están haciendo contra nosotros', apuntó el sacerdote Augusto Gutiérrez. -
6 / 13Masaya, 30 kilómetros al sureste de Managua, con unos 100.000 habitantes, es una ciudad de artesanos y pequeños agricultores y ha sufrido el saqueo y quema de negocios, lo que ha obligado a la población a bloquear sus entradas para evitar el desplazamiento de elementos antimotines y grupos de choque afines al gobierno. -
7 / 13Al comenzar la nueva semana de protestas, se reportan unos 48 bloqueos de carreteras en todo el país, lo que el gobierno ha intentado desalojar sin éxito, porque en la mañana quitan los obstáculos y por la tarde y noche los manifestantes lo vuelven a poner. -
8 / 13Masaya era color. Era música y era diversión. Artistas en vivo y teatro callejero. Era la capital del folclore nicaragüense. La auténtica demostración del heroísmo nacional desde la época de la colonización. Mas ahora es miedo. Es canguelo y desconfianza. Su gente se organiza 'para lo que venga'. -
9 / 13Decenas de soldadores se dedican a hacer morteros, armas hechizas y 'miguelitos', un arma simple formada por cuatro o más púas metálicas afiladas de unos 16 centímetros de largo utilizada, sobretodo, para romper las ruedas de los vehículos.
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10 / 13Son armas artesanales. No tienen dinero ni recursos para pelear contra lo que consideran el 'enemigo', los grupos paramilitares del Gobierno, la policía y los miembros de la Juventud Sandinista. Mas para ellos es suficiente para asegurarles que en su contra 'no hay vagos', sino el 'pueblo', que está hastiado de la opresión y la represión. -
11 / 13Contra ello solo tienen escudos. Unas chapas que han cortado de los barriles de combustible y que solo han pintado de azul y negro con la palabra 'Nica' al frente, además de sus bombas caseras. Símbolo de su lucha. -
12 / 13Y es que Masaya, según denuncian sus vecinos, ha sido un 'blanco' del Gobierno. Como este pasado fin de semana. Cuando les han atacado 'con todo'. Tanto que uno de los vecinos enseña cargadores y balas de un AK47. -
13 / 13La gente ha levantado sus calles para protegerse. Se organizan y se preparan. A más de cinco kilómetros antes del centro empiezan las barricadas para asegurar su fuerte.