Donald Trump y su esposa Melania ya comenzaron a hacer las maletas para mudarse el próximo 20 de enero a su exclusivo y lujoso resort en Florida, Mar-a-Lago, ubicado en el centro de Palm Beach, y que desde 2016 había sido denominado como 'la Casa Blanca de invierno' para el magnate y su familia que pasaban ahí sus vacaciones de fin de año huyendo de las gélidas temperaturas en Washington D.C.
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Mar a Lago es la residencia favorita de los Trump y allí recibieron a varios líderes mundiales, incluyendo el ex primer ministro de Japón, Shinzo Abe, uno de los aliados más cercanos del presidente estadounidense.
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Además de la residencia de Trump, Mar a Lago, un exclusivo club social cuenta con 114 habitaciones y es uno de los sitios predilectos para vacacionar de decenas de millonarios, donde la membresía oscila entre los 200,000 dólares.
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Mar-a-Lago cuenta con un spa, seis pistas de tenis, un campo de golf (el deporte favorito del magnate), gimnasio, piscina, un salón de belleza y varios restaurantes.
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La enorme residencia principal del resort, es el lugar elegido por Trump y Melania para seguir con su vida tras la Casa Blanca.
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'La residencia de Trump, que una vez perteneció a la creadora de la propiedad de Mar-a-Lago, Marjorie Merriweather Post, será ampliada y arreglada. Están renovando su piso dentro del club Mar-a-Lago para hacerlo más grande, más moderno y cómodo para su uso', aseguró una fuente a la revista People.
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Mar a Lago es sinónimo de lujo y opulencia desde su construcción en 1922. Tres embarcaciones llenas de piedra fueron traídas de Génova, Italia, para las paredes exteriores, arcos y parte del interior.
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Trump compró Mar a Lago en 1985 y lo convirtió en su lugar de residencia hasta 1995, cuando lo renombró como The Mar-a-Lago Club. Su organización ha invertido millones de dólares en renovaciones a esta lujosa propiedad.
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La decoración del complejo combina diseños europeos con elementos de lujo, de oro y gigantescos cristales.
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Melania Trump viajó el fin de semana pasado a Florida para visitar una escuela privada en la que se presume inscribirá a su hijo Barron, de 15 años.