La trayectoria vital de Amy Winehouse parece calcada de la de su compatriota Pete Doherty: un rápido triunfo en la escena musical independiente de su país, una relación de pareja tortuosa para alimentar a los tabloides y escarceos con las drogas que amenazan con terminar en desgracia.
El último capítulo de la desastrosa vida de Winehause ocurrió esta semana, cuando el diario sensacionalista Sun publicó en su web un vídeo en el que la cantante parecía fumar crack.
Ahora, la policía ha anunciado que investigará la grabación y tomará las correspondientes acciones legales contra ella.