REDACCIÓN. La actriz estadounidense Sharon Stone ha estado compartiendo en sus redes sociales las relajantes vacaciones que se encuentra viviendo junto a su familia por Europa. La rubia de 66 años ha estado posteando imágenes disfrutando de hermosos destinos costeros en Italia, las cuales sus casi cuatro millones de seguidores han halagado.
Sin embargo, en una de las salidas la actriz protagonista de la exitosa película “Bajo instintos”, perdió el control y recibió un fuerte golpe en su cara, específicamente en uno de sus ojos que levantó la preocupación de sus muchos seguidores por todo el mundo.
Confesó que haber visitado tantos países y después aterrizar en Turquía la dejó mal, “estaba tan aturdida que no sabía dónde estaba. Terminé dándome un golpe en la cara contra el mármol”, explicó luego de postear una imagen luciendo radiante en un ascensor y en la cual resaltaba el fuerte hematoma en su cara.
Tras las insistentes preguntas de cibernautas en el post sobre qué le había sucedido, la también modelo decidió dar la cara y ofrecer detalles de cómo se encuentra en estos momentos tras el aparatoso momento.
Primero, manifestó que aunque ha sido un momento de tensión al ser un golpe tan fuerte en la cara, ha pasado tiempo de calidad con sus seres más queridos, conociendo paisajes únicos e irrepetibles. Además, extendió palabras de agradecimientos a sus fanáticos por el amor que le han demostrado con comentarios de preocupación.
“Gracias por preocuparse por mí, yo también me preocupo por ustedes. Estoy con mi familia en un tiempo espléndido”, aseveró Stone.
La salud de la actriz sigue preocupando a sus seguidores
La salud de Sharon Stone es de especial consideración para sus fanáticos después de que recientemente ahondara en el derrame cerebral que sufrió en 2001, el cual impactó profundamente en su carrera profesional y su vida personal.
“Tuve una hemorragia cerebral que duró nueve días, lo que provocó que mi cerebro se desplazara hacia la parte frontal de mi cara. No estaba en su posición normal en mi cabeza”, comentó Stone en una entrevista para The Hollywood Reporter.
Según reveló la actriz, las secuelas del derrame la afectaron durante un largo período de su vida: “Mi sentido del olfato, mi vista, mi tacto, todo cambió. No pude leer durante un par de años. Las cosas se veían alargadas y percibía patrones de colores. Mucha gente pensó que iba a morir”.