El cantante Alejandro Sanz reconoció en Miami que, pese a llevar 25 años en el mundo de la música, aún no ha superado el miedo escénico y sigue poniéndose nervioso antes de subirse a un escenario.
“Los nervios son una de las cosas que uno debe controlar primero. Enfrentarte a un público no es fácil y nunca dejas de ponerte nervioso antes de subir a un escenario”, confesó el artista poco antes de comenzar un concierto.
Según dijo “lo importante es tener un buen equipo de gente alrededor y confiar en que los demás no te van a fallar” para, así, poder estar seguro de ofrecer un buen recital.
“La música es una pasión”
El intérprete de Corazón Partío o Y, ¿Si fuera ella? relató que se inicio en el mundo de la música casi por casualidad: “Mi madre nos llevó a mi hermano y a mí a una academia de kárate, pero como estaba cerrada nos apuntó a una de guitarra, que estaba justo al lado”, bromeó el artista afincado en Miami.
Sanz reconoció que para él, la música es muy importante en tanto que “es algo que uno lleva dentro, es una pasión”. Sobre la situación que vive la industria musical en la actualidad, el artista opinó que “la música todavía no se ha acomodado a los tiempos que corren y a la velocidad a la que cambia todo”.