Cameron Díaz ha cambiado de imagen. A simple vista podríamos darnos cuenta del notable cambio en el color de su pelo, de rubia a morena, aunque, si vamos un poco más allá, apreciamos un ligero cambio en su rostro.
La bella protagonista de Los Ángeles de Charlie se ha sometido a una rinoplastia, tal y como ella misma ha confirmado.
Díaz insiste en que su operación de nariz no ha sido por estética sino por necesidad: “Me he roto la nariz cuatro veces, la última practicando surf en mi 31 cumpleaños en Hawai, y no puedo respirar.
Uno de los lados de mi nariz está totalmente destrozado, mi tabique nasal es como un tren descarrilado”.
Y añade: “No es por estética, es puramente por razones médicas. Lo hago simplemente con el propósito de respirar bien. No recibo la mitad del oxígeno y hay veces que no puedo recordar las cosas y yo lo culpo a la falta de oxígeno”.
Fobia al compromiso
La actriz se ha puesto en manos del doctor Raj Kanodia, el mismo cirujano de Beverly Hills que operó a Ashlee Simpson, y los resultados han sido excelentes.
Hace días pudimos verla mientras salía del gimnasio en West Hollywood tras someterse a la cirugía.
“No quiero casarme. Tengo fobia al compromiso”.
Al margen de su nuevo ‘look’, Cameron hizo unas sorprendentes declaraciones hace unos días en el programa de Ellen Degeneres, donde promocionó su nueva película The Holiday junto a Jude Law.
La actriz, que desde hace cuatro años mantiene un noviazgo con Justin Timberlake, ha señalado que tiene “fobia al compromiso”.
Cameron ha cerrado los rumores acerca de una posible boda: “No quiero casarme. Estamos como si estuviéramos casados”. Sí, responde Ellen, aunque sin “los beneficios fiscales”.
La protagonista de Algo pasa con Mary reveló el porqué de coger el ramo de novia en las bodas.
Lo dijo
“No se trata de luchar para coger el ramo, es simplemente estar en el sitio adecuado y en el momento justo. Para mi es como un deporte. No quiero casarme”.
