Los Ángeles, Estados Unidos.
Lindsay Lohan ha dejado atrás sus días de fiesta en Hollywood, gracias a que tiene un nuevo amor: el heredero ruso Egor Tarabasov. La problemática actriz, de 29 años, lleva siete meses saliendo con el joven, de 22, quien es hijo de un importante hombre de negocios, aseguró una fuente a la revista People.
La pareja ha estado viviendo entre Nueva York y Londres, por lo que Lindsay ya no planea regresar a Los Ángeles, agregó el informante.
La diferencia de edad no ha sido ningún problema, pues ambos se entienden muy bien y Lohan ya le presentó el joven a su familia.
La actriz incluso ha publicado varias fotos en redes sociales de los momentos que pasan juntos.
Buen ejemplo
De acuerdo con el portal TMZ, Egor es un chico muy cariñoso y muy maduro para su edad, pues es dueño de su propia empresa y ha motivado a Lohan para mantenerse lejos de las drogas y el alcohol y retomar su carrera artística.
La neoyorquina pasó por varios tratamientos de rehabilitación en los últimos años, por sus problemas con las drogas y el alcohol, así como una serie de inconvenientes con la Justicia. Tarabasov vive en Londres, donde está comenzando a instalar su propia compañía de bienes raíces.
Lindsay Lohan ha dejado atrás sus días de fiesta en Hollywood, gracias a que tiene un nuevo amor: el heredero ruso Egor Tarabasov. La problemática actriz, de 29 años, lleva siete meses saliendo con el joven, de 22, quien es hijo de un importante hombre de negocios, aseguró una fuente a la revista People.
La pareja ha estado viviendo entre Nueva York y Londres, por lo que Lindsay ya no planea regresar a Los Ángeles, agregó el informante.
La diferencia de edad no ha sido ningún problema, pues ambos se entienden muy bien y Lohan ya le presentó el joven a su familia.
La actriz incluso ha publicado varias fotos en redes sociales de los momentos que pasan juntos.
Buen ejemplo
De acuerdo con el portal TMZ, Egor es un chico muy cariñoso y muy maduro para su edad, pues es dueño de su propia empresa y ha motivado a Lohan para mantenerse lejos de las drogas y el alcohol y retomar su carrera artística.
La neoyorquina pasó por varios tratamientos de rehabilitación en los últimos años, por sus problemas con las drogas y el alcohol, así como una serie de inconvenientes con la Justicia. Tarabasov vive en Londres, donde está comenzando a instalar su propia compañía de bienes raíces.