Cada año que transcurre, los egresados de las diferentes escuelas bilingües de la ciudad se lucen con sus espléndidas fiestas de graduación.
La noche del jueves fue el banquete de la generación 2011 de la Academia Americana, que este año fue un verdadero derroche de elegancia juvenil en una estancia adornada con mucha suntuosidad.
El Centro Social Hondureño Árabe reunió a más de mil 500 invitados, quienes llegaron muy temprano a la cita para congratular a los 83 nuevos profesionales que en pocas semanas comenzarán una ajetreada vida universitaria en Honduras y en el extranjero.
Elegancia
Para la ocasión, muchas de las graduadas se decantaron por las creaciones de alta costura de la artista de la moda revelación de este año: Irene Canizales, quien vistió con mucho color y distinción a varias chicas que lucieron con gran alegría los tan elaborados y suntuosos diseños.
Otras optaron por vestidos de los modistas Lutfi Jananía o Lourdes Ortiz, mientras que el diseñador Sergio Paz no se quedó atrás creando regios vestidos de gran volumen que son los tradicionales para este tipo de eventos sociales.
Los chicos no se quedaron atrás y con la etiqueta rigurosa que se acostumbra para las grandes galas sampedranas, así llegaron los hoy profesionales para compartir en esa memorable cita juvenil.
La florista Jacqueline Cabrera se encargó de ambientar con mucha hortensia, follaje verde y cortinajes la estancia de fiesta, donde hubo, como era de esperarse, un ameno baile que se prolongó hasta el anochecer en medio de gran regocijo de padres de familia y estudiantes.
