La actriz Elizabeth Gutiérrez ha negado cualquier vínculo con la reciente detención de su expareja, el actor cubano William Levy.
Según declaraciones de su equipo legal, ella ha contratado representación para proteger su reputación frente a rumores que la relacionan con el incidente.
Estos rumores sugieren que Elizabeth Gutiérrez podría haber estado involucrada en una supuesta trampa, lo que ha llevado a su equipo a tomar medidas legales contra quienes difundan información falsa o misógina.
La firma de abogados de Pous emitió un comunicado a través de sus redes sociales, exponiendo la situación y la postura legal de Gutiérrez.
El texto señala: "Los servicios profesionales de esta Firma han sido contratados por la señora ELIZABETH GUTIÉRREZ con el propósito de salvaguardar sus derechos fundamentales, los cuales han sido vulnerados de manera reiterada mediante la difusión de información imprecisa, falsa y tendenciosa, atentando su esfera personal y privada".
El comunicado continuó con una crítica al ejercicio irresponsable del periodismo y la difusión de información dañina.
"Lamentablemente, en la actualidad, cualquier individuo con acceso a herramientas tecnológicas y un canal de difusión convencional puede autodenominarse 'reportero'. Sin embargo, ni el ejercicio periodístico ni la libertad de expresión constituyen licencia para calumniar, difamar o agredir la dignidad de una persona. El pretexto del 'secreto profesional' o el supuesto derecho a opinar no eximen de responsabilidad a quien transgrede la ley".
Consecuencias legales
La firma de Pous enfatizó la inviolabilidad de los derechos fundamentales:
"Los derechos a la intimidad, la vida privada, el honor, la reputación, el prestigio y la propia imagen no se negocian. Su respeto es exigible aun tratándose de personas consideradas de proyección pública, ya que su violación genera consecuencias graves, irreparables en muchos casos, y que en su dimensión legal pueden configurar actos de difamación, discriminación y violencia mediática, como ha venido ocurriendo sistemáticamente en perjuicio de nuestra representada".
El despacho legal advirtió también sobre las consecuencias legales para quienes difamen, pues especificaron que "Ninguna profesión ni oficio justifica exceder los límites de la legalidad. Quien se escuda en la libertad para denostar, debe asumir las consecuencias de sus actos. Siempre que exista un provocador cobarde, debe haber quien defienda con determinación y sensatez".
El comunicado se refiere directamente a los señalamientos misóginos contra Gutiérrez, afirmando que "Los señalamientos y comentarios dirigidos contra la señora Gutiérrez, por parte de quien se ostenta como 'reportero', no sólo evidencian un sesgo personal, subjetivo y reiteradamente misógino, sino que están claramente diseñados para incitar al odio, denigrar sus logros y violentar su dignidad. Este tipo de ataques trascienden lo que pudiera interpretarse como una nota informativa y afectan directamente su entorno personal y familiar".
Finalmente, la firma de abogados anunció acciones legales contundentes:
"Por lo anterior, hemos sido instruidos para actuar en consecuencia e impedir, de manera inmediata y definitiva, que sigan ocurriendo estas situaciones, ya provengan del (los) individuo(s) identificado(s), o de cualquier otro que abuse de un medio de comunicación, cualquiera que sea su formato, plataforma o empresa".