Los Ángeles, Estados Unidos.
Justin Timberlake y Will.i.am tienen problemas legales. Ambos están siendo demandados por presuntamente robar la música de Damn Girl, canción que fue parte del álbum FutureSex/LoveSounds del ex de Britney Spears.
Diez años después del lanzamiento del disco, son acusados de utilizar bases del tema A New Day Is here al last de 1969, escrito por Perry Kibble, un compositor y productor que era parte la banda de funk y disco A Taste of Honey.
Según el portal infobae.com, en la demanda se da a conocer que “las partes de A New Day Is Here At Last que fueron copiadas en Damn Girl son enormes, incluyendo la introducción, el ritmo, la armonía, la melodía y hook, elementos que son sujetos a ‘copyright’ individualmente y en combinación”.
También están copiados los “riffs” de guitarra y los ritmos de batería, así como el saxofón y el sonido del órgano.
Petición
Tras la muerte de Kibble, ocurrida en 1999, la licencia pasó a manos de Janis McQuinton, su hermana y actual directora de PK Music Performance. En su demanda exigen “una cantidad no revelada” de dinero por daños.
Además, piden parte de las ganancias que tuvieron por la canción y pagar los honorarios de los abogados. Finalmente, la compañía quiere que se eliminen todas las copias del single de Timberlake y Will.i.am.
Justin Timberlake y Will.i.am tienen problemas legales. Ambos están siendo demandados por presuntamente robar la música de Damn Girl, canción que fue parte del álbum FutureSex/LoveSounds del ex de Britney Spears.
Diez años después del lanzamiento del disco, son acusados de utilizar bases del tema A New Day Is here al last de 1969, escrito por Perry Kibble, un compositor y productor que era parte la banda de funk y disco A Taste of Honey.
Según el portal infobae.com, en la demanda se da a conocer que “las partes de A New Day Is Here At Last que fueron copiadas en Damn Girl son enormes, incluyendo la introducción, el ritmo, la armonía, la melodía y hook, elementos que son sujetos a ‘copyright’ individualmente y en combinación”.
También están copiados los “riffs” de guitarra y los ritmos de batería, así como el saxofón y el sonido del órgano.
Petición
Tras la muerte de Kibble, ocurrida en 1999, la licencia pasó a manos de Janis McQuinton, su hermana y actual directora de PK Music Performance. En su demanda exigen “una cantidad no revelada” de dinero por daños.
Además, piden parte de las ganancias que tuvieron por la canción y pagar los honorarios de los abogados. Finalmente, la compañía quiere que se eliminen todas las copias del single de Timberlake y Will.i.am.