A través de un beso se puede contagiar una bacteria llamada helicobácter pylori, la cual es la causa de úlceras en el estómago y duodeno, además de ser condicionante para padecimientos más graves como el cáncer en el sistema digestivo, manifestó Mauricio Di Silvio, subdirector de Enseñanza e Investigación del Centro Médico Nacional '20 de Noviembre'.
Esto se debe a que la bacteria se puede alojar en el sarro de los dientes, se transmite a otras personas por comer del mismo plato o como ya se dijo por un beso.
Cuando a un miembro de la familia ya se detectó es probable que por lo menos una persona más esté contagiada.
Su transmisión es relativamente fácil porque al no tener hábito higiénico puede obtenerse a través de un saludo de manos o por el mal manejo de los alimentos, sobre todo los expuestos en las calles, pues la gran parte de éstos contienen heces fecales transmitidas por el medio ambiente.
Esta bacteria en forma de espiral aumenta la secreción ácida que daña el tejido gástrico y/o duodenal, causando inflamación, gastritis o hasta úlceras.
Y los síntomas más frecuentes de la primera son: dolor estomacal, ardor, náusea y falta de apetito, manifestaciones que pueden ser desde leves hasta graves, como tener una úlcera, pérdida de peso, pesadez estomacal y mala digestión.
El médico apuntó que diversos grupos en el mundo trabajan en la investigación de una vacuna que aún se encuentra en fase experimental, pues se trata de una bacteria muy resistente que fuera del organismo vive en el agua y dentro de éste puede sobrevivir en condiciones extremas.
Por ello, aunque la afectación es curable en la mayoría de los casos, su erradicación no es tan simple, ya que el microorganismo también desarrolla resistencia a algunos fármacos, por lo que para erradicarla se requiere de medicamentos que controlen la secreción de ácido, de antibióticos y de que el paciente no interrumpa el tratamiento, cuya duración es de dos semanas, en promedio. 'Para que su tratamiento sea exitoso hay que respetar con exactitud la dosis, los horarios y la duración indicada por el médico. Tomarlos en forma correcta no implica, sin embargo, deshacerse de la enfermedad para siempre', explicó.
La mayoría de las úlceras, dijo, mejoran con un tratamiento apropiado; no obstante, es conveniente que ante la presencia de algunos de los siguientes síntomas se acuda de inmediato al médico: dolores fuertes y repentinos en el estómago, pérdida de peso progresivo, vómitos frecuentes o sanguinolentos, heces oscuras, grises o con rastros de sangre o dolor que continúa después de haber ingerido los medicamentos en forma adecuada.
Entérese
El médico apuntó que diversos grupos en el mundo trabajan en la investigación de una vacuna que aún se encuentra en fase experimental, pues se trata de una bacteria muy resistente que fuera del organismo vive en el agua y dentro de éste puede sobrevivir en condiciones extremas.
