08/12/2025
10:46 AM

Piden elaborar un presupuesto más balanceado

El Gobierno prevé un incremento del 5% en los gastos, pero la economía solo crecerá 3%

San Pedro Sula. En vista de la situación fiscal de las finanzas públicas, los economistas consideran que la acción más prudente al aprobar el presupuesto general de la República es que este refleje un menor déficit, es decir que se reduzca la brecha entre ingresos y gastos.

Este objetivo se conseguiría aprobando un presupuesto para 2014 notablemente menor al del presente ejercicio fiscal y para ello será necesario replantear las cifras con base en datos más realistas.

Hugo Noé Pino, investigador del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales y de Unitec, señala que los criterios en que se basa el presupuesto para 2014 no corresponden a la realidad del país y mientras estos no se apeguen a esa situación financiera, difícilmente se podrá tener un proyecto de presupuesto balanceado y financiable.

“Los lineamientos no son reales porque parten de un déficit fiscal de 6%, cuando va a ser más alto”, ejemplifica el analista.

En vista de lo anterior, “el presupuesto tendrá que ser reformulado para adecuarlo a lo que el próximo Gobierno va a recibir”.

El economista Raúl Reina hace notar que las proyecciones preliminares del presupuesto hacen calcular un incremento de 5% en comparación con el aprobado para 2013, a pesar de que el crecimiento del producto interno bruto (PIB) no será muy superior al 3%.

“Sería insostenible (aumentar en esa cifra el presupuesto) porque no hay un incremento del PIB en ese porcentaje”, advierte Reina. El también asesor empresarial agrega que la posición del presidente Porfirio Lobo de retrasar la aprobación del presupuesto hasta después de las elecciones no está del todo errada.

“Definitivamente se va a tener que replantear ese presupuesto y precisamente por eso se pide que no se apruebe ahorita, porque se tiene que replantear según el plan del nuevo Gobierno”.

Cómo se financiará

Para financiar el presupuesto, los expertos coinciden en que se tendrán que tomar medidas que combinen esfuerzos para obtener mayores ingresos con un menor gasto, en cuyo caso no se descartan recortes en áreas consideradas superfluas.

Así, tendría que bajar el gasto en viajes, reuniones en hoteles de lujo y otros. Por el lado de los ingresos se plantea la necesidad de eliminar las exoneraciones que no se justifiquen y expandir la base de contribuyentes.

Se espera que el próximo Gobierno negocie un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, lo cual abre nuevas posibilidades de financiamiento en la forma de créditos internacionales y apoyos presupuestarios, que se han dejado de recibir en los últimos dos años.