Redacción, Honduras Lo peor que se puede hacer ante una deuda es esconderse. Lo apropiado, así sea en el peor de los casos es hablar directamente con el banco, ser realista y plantear la situación para que entre ambas partes se pueda buscar una solución, aunque esta sea complicada. En este punto se debe tener en cuenta la tasa de interés al momento de renegociar.
Si las condiciones no permiten seguir adelante, una solución puede ser consolidar las deudas y venderlas a una institución que pueda comprarla. Acá importará mucho el nivel de endeudamiento que tenga, su ingreso fijo, sus gastos fijos parta determinar su capacidad de pago hacia un préstamo.
Aunque sin duda traerá un aumento en los intereses, un posible estiramiento en el plazo a pagar, renegociar puede ayudarle a poner en orden sus finanzas. Este es uno de los caminos más difíciles para quien tiene el crédito, pero tras mucho esfuerzo ayudará a decir adió al problema.
Si bien supone mucho más esfuerzo de tu parte, hay que darse cuenta que con el talento que cada quien posee se pueden generar algunos ingresos que ayuden a salir de deudas o a incrementar los montos que puedes solicitar como préstamos.
No consumir más de lo que puedes pagar, llevar el registro de lo que consumes, no darte gusto innecesarios, no elevar tu deudas por encima del 30 por ciento de los ingresos que recibe, evitar los créditos para consumo y el uso de las tarjetas de crédito y pagar a tiempo son otros consejos para enderezar el camino.
Una forma de organizar los pagos es atacar primero los que suponen mayores intereses, esto puede dirigirse también a los montos en moneda extranjera, para evitar que la deuda se vuelva impagable. Haga un análisis y defina cuáles son las obligaciones que le suponen este tipo de intereses.
Como no todo en el mundo es blanco o negro hay quienes empiezan dando prioridad a las deudas más pequeñas, para que poco a poco el dinero disponible aumente para afrontar las deudas más grandes.
En verdad necesitas todas las tarjetas que tienes? La verdad es que solo necesitas una y para emergencias. Utilizarás esa única tarjeta de crédito para comprar solo “cosas de emergencia” y las que sepas que podrás saldar en poco tiempo hasta que puedas controlar por completo tus gastos.
Se puede vivir sin deudas, se puede salir adelante y se puede reorganizar la vida es posbile. Ojo no es fácil, pero al final es una prueba de constancia, de organización y responsabilidad.
Las soluciones rápidas no duran, sin embargo, aprender a administrar tu dinero puede traer mucha tranquilidad a tu vida y podrás dedicar tus esfuerzos mentales a cosas más divertidas.
Aunque cada caso es único al hablar de finanzas personales y cada quien parece tener las mejores claves para salir de las deudas, cuando el camino parece cerrarse siempre hay una luz al final del túnel para pagar.
Lo importante, según los expertos es no perder la cabeza, pensar con cabeza fría, analizar los pormenores y la disciplina son el principal remedio para cuando el bolsillo y la billetera no andan bien.
También es importante tener en cuenta estos consejos:
1
dar la cara
2
VENDA LA DEUDA
3
Renegociar
4
INCREMENTA INGRESOS
5
organización
6
mayores intereses primero
7
Las más bajas prioridad
8
tarjeta de emergencia
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