una empresa multinacional ha reportado pérdidas superiores a los 300 millones de dólares en los años 2012 y 2013, pero a pesar de esto sigue operando. La compañía forma parte de un grupo de 30 grandes contribuyentes nacionales y extranjeros que hacen uso de varios mecanismos, como el declarar pérdidas para evadir el pago de impuesto.
Según registros de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI), en Honduras operan más de 600 grandes empresas en diversos rubros productivos, las que son catalogadas como tal en base a varios criterios, entre los que resalta el que su aportación fiscal sea mayor o igual a los 2,000,000 de lempiras.
La multinacional reportó 2,000 millones de lempiras en pérdidas en el ejercicio fiscal 2013 y 4,000 millones en ejercicio fiscal en 2012. “Es una empresa multinacional que lastimosamente nos ha impactado negativamente en nuestras metas de recaudación”, dijo la directora de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI), Mirian Guzmán. “Es una empresa con alta presencia en el mercado nacional. Una empresa exitosa a la vista, pero que reporta pérdidas”, apuntó.
El resto de empresas han hecho uso de “varias artimañas” para evadir el pago de impuestos. Hay las que han reportado pérdidas entre los 150 y los 750 millones de lempiras, solo en el ejercicio fiscal de 2013, y otras que se dedican al rubro de importación de bienes que estarían subvaluando sus mercaderías mediante la presentación de certificados de origen acreditando que ellos están importando de un país con el cual Honduras tiene tratados de libre comercio, cuando en realidad el producto viene de un tercer país.
Uno de los casos que se investiga es el de una empresa nacional que estaba importando carne de Brasil, pero que la estaba reportando como comprada en Estados Unidos, en el marco del Tratado de Libre Comercio que ese país tiene en vigencia con los países centroamericanos y República Dominicana.
Otras empresas reportan gastos operativos mucho más altos que los que el precio del mercado obedece o que reportan menos mercadería de la que realmente han importado.
La evasión fiscal de estas empresas alcanzaría los 800 millones de lempiras.
Fiscalización
Estas 30 empresas son sometidas a un proceso de fiscalización profunda, se les está revisando toda su documentación. Si son empresas dedicas a la importación se les está verificando importaciones versus las ventas que puedan estar reportando. Es un proceso de fiscalización fuerte, dijo Guzmán.
“Se está haciendo uso de las herramientas que las leyes del país establecen para hacer frente a estos delitos, leyes que estaban allí pero que no se estaban utilizando. Uno de esos mecanismos es el aprobado en 2013, que permite el acceso a la información que está en el sistema bancario nacional como referente para determinar si existe o no evasión fiscal”, explicó la funcionaria.
Además contarán con el apoyo de dos expertos internacionales que llegarán al país para acompañar a la DEI en las investigaciones para determinar si ha existido o no defraudación o evasión fiscal.
Honduras reformó en 2013 el Código Tributario con el propósito de penalizar los delitos de evasión fiscal, que ahora se pagan con cárcel. Hasta antes de estas reformas, la acción penal se extinguía con el pago de los impuestos adeudados al Estado.
Ahora son dos acciones paralelas que no se entorpecen entre sí, es decir, que una es la acción administrativa para obtener los impuestos dejados de percibir por el Estado, y otra la acción penal emprendida por la Fiscalía.
La acción penal se emprende contra los representantes legales de las empresas, que en estos casos pudiese coincidir con la de gerencia.