El intercambio comercial que Honduras realiza vía marítima por este municipio se ha concentrado en una corta lista de seis productos. La importación y exportación de combustibles, vehículos, derivados del acero, melaza, azúcar sin refinar y madera son las que mantienen activo el Puerto de San Lorenzo.
El movimiento de carga a granel, principalmente de mercaderías procedentes de países asiáticos como China, Japón, Taiwán, Malasia y Filipinas, fue hasta el año 2003 la principal actividad por esta instalación portuaria, ya que al año siguiente, la naviera japonesa Nippon Yusen Kaisha, NYK, trasladó sus operaciones hacia el Puerto Acajutla, El Salvador.
NYK continúa usando San Lorenzo sólo para la introducción de automóviles. Lo anterior no sólo redujo el tráfico marítimo por este puerto sino que también impactó en las recaudaciones aduaneras, las que en los últimos siete años observaron una drástica caída.
Con la entrada en función del Puerto La Unión, El Salvador, algunos sectores de la zona sur del país consideran que algunas empresas pueden trasladar el transporte de mercaderías al vecino país, pero los funcionarios de esta instalación portuaria consideran que es muy remoto que eso ocurra por el aumento que significaría en el flete terrestre.
Transporte
De acuerdo con registros de la Empresa Nacional Portuaria, ENP, el año pasado ingresaron 149 embarcaciones por San Lorenzo, de los que 67 -45 por ciento- eran barcos petroleros. Los combustibles son destinados a la terminal de la empresa Petróleos del Sur, Petrosur, la que tiene ubicados sus tanques de almacenamiento a cuatro kilómetros del área de descarga de los carburantes, los que posteriormente distribuye en el territorio nacional. Otra parte de los derivados, principalmente búnker, es almacenado por la compañía Luz y Fuerza de San Lorenzo, Lufussa, quien maneja el parque térmico más grande que opera en el país, el que genera 387 megavatios de energía térmica a través de sus tres plantas. Ayer estas dos empresas realizan labores de descarga en el muelle de 300 metros que se construyó en la bahía Henecán.
La importación de combustibles es la actividad que genera el mayor tráfico marítimo en lugar, subrayó Óscar Umanzor, jefe de Operaciones del Puerto de San Lorenzo. Agrega que esta instalación portuaria está capacitada para atender una mayor demanda de servicios y en ese sentido ellos han sostenido reuniones con los representantes de las cinco navieras que tienen operaciones aquí.
Elda Velásquez, asistente del Departamento de Operaciones, dijo que la ENP ha realizado una revisión tarifaria para bajar los costos de los servicios que prestan a las navieras y quizás lo que falta es una campaña de promoción del Puerto de San Lorenzo, ya que hay inversionistas extranjeros interesados en importar mercaderías a través de este lugar. La funcionaria dijo que sería oportuno que en todas las embajadas y consulados que tiene Honduras en el exterior se promueva las facilidades que brinda San Lorenzo al intercambio de mercancías.
Comercio
La importación de productos duraderos y semiduraderos provenientes de los países asiáticos también se ha visto afectada por la operación de la zona libre de Panamá. Velásquez, quien tiene 31 años de laborar en este puerto, dice que los empresarios hondureños ahora prefieren viajar a Panamá a realizar sus compras, las que tardan dos o tres días para ingresar a Honduras, contrario cuando se traían desde Asia, ya que el barco ocupa al menos 24 días para llegar a San Lorenzo.
Añade que desde 2004 se dejó de importar de ese continente muchos productos como prendas de vestir, comestibles, electrodomésticos, adornos, entre otros, los que ahora se compran en Panamá o se introducen vía Acajutla. Lo que ha venido a elevar las operaciones portuarias es la exportación de óxido de hierro, el que se extrae de Agalteca, Talanga y se envía hacia China y Panamá, y muy pronto a los mercados de México e Italia.