La rotación de químicos y el desarrollo de la biotecnología fueron algunas de las propuestas que resultaron del tercer Foro Internacional de Cítricos para frenar al Huanglongbing o HLB, una enfermedad que está diezmando las plantaciones de cítricos a nivel mundial.
Durante el evento, que se llevó a cabo en San Pedro Sula, la titular de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), Laura Suazo, destacó que en 2022 la exportación de cítricos registró un aumento del 12.3% en valor y 6.7% en volumen, con respecto a 2021.
Pese al leve incremento, productores expresaron que, aunque son optimistas, aún es temprano para asegurar que “estamos en camino a recuperar la producción” que se tenía antes de que el HLB llegara al país.
Carlos Morazán, presidente de la Asociación de Citricultores de Sonaguera, señaló que desde hace 20 años la producción de cítricos ha disminuido en el país, producto del HLB.
Morazán dijo que la enfermedad está afectando a todas las regiones productoras, pese a los esfuerzos que están realizando los citricultores, la SAG y Orisa.
Explicó que Honduras ha sido ejemplo en el manejo del HLB en la región, puesto que trabajan en capacitar a los citricultores y utilizan técnicas de manejo estandarizadas a nivel internacional.
Efectos del HLB
A punto de erradicar cultivo en Belice. San Pedro Sula. Fermín Blanco, representante de Oirsa en Belice, informó que el HLB ocasionó que el país pasara de producir 5 millones de cajas en 2009 a 800,000 en 2023 y redujo el área de cultivo en 80%
No obstante, esto no ha sido suficiente, la enfermedad ha proliferado y afecta la producción, haciendo que Honduras pasara de producir 300,000 toneladas métricas de naranja a 100,000 toneladas en los últimos años.
Morazán hizo hincapié en que estas 200,000 toneladas menos se traducen en desempleo, menos ingresos para los productores y el Estado.
Dijo que entre los retos que enfrenta el sector están el acceso a tecnología, el financiamiento y que la mayoría de las fincas son pequeñas, lo que provoca que la enfermedad se propague más rápido. Agregó que el HLB tiene preocupado a todo el sector, en especial tras conocer las cifras de Brasil.
Al respecto, el doctor en fitopatología José Belasque expuso que la enfermedad está causando estragos en el país sudamericano, aunque los efectos no son visibles en términos de producción y exportación.
Durante su participación como expositor, Belasque explicó que lo que sucede en Brasil es que los grandes productores están migrando a regiones que no han sido tan afectadas por el HLB y están estableciendo nuevos plantíos para mantener la producción. Sin embargo, tras estas cifras positivas, se esconde el impacto socioeconómico del HLB, que ha llevado a miles de productores a abandonar el sector.
Reveló que Brasil, un referente en la citricultura, ha perdido más de 2,000 productores, en su mayoría pequeños, pasando de ser 7,588 en 2015 a unos 5,074 en la actualidad.
A su vez, destacó que el HLB se ha propagado exponencialmente. En 2008, cuando se hizo el primer levantamiento de información en Brasil, se encontró que el 0.6% de los 200 millones de árboles de naranjas cultivados en el país estaban infectados, pero en 2022 la cifra ascendió a 38%.
Belasque dijo que este es un problema serio que marcará el futuro del sector, por lo que de forma inmediata, sugirió hacer rotación de grupos químicos, para evitar que el HLB desarrolle resistencia, como pasó con los insecticidas del grupo piretroides y neonicotinoides.
Mientras que a futuro, ve una esperanza en la biotecnología. Compartió que investigadores de EUA encontraron que un grupo de especies botánicas, compatibles sexualmente con los cítricos, mostraron resistencia a la enfermedad, por lo que están trabajando en el desarrollo de híbridos resistente al HLB.
Añadió que también están trabajando en desarrollar una sustancia que se pueda rociar a las plantas enfermas, a partir de moléculas químicas que estas plantas generan para resistir al HLB.
