El gobierno del presidente Manuel Zelaya Rosales deberá limitarse a contraer endeudamiento externo de entre 200 y 230 millones de dólares anuales.
El parámetro fijado por los organismos financieros es que Honduras debe mantener un coeficiente de endeudamiento externo de 40% del PIB para que la deuda externa sea sostenible.
Los coeficientes de endeudamiento han mejorado en la presente década: en 2000 era de 70% del PIB (saldo de 4,147.8 millones) y en 2005 alcanzó 52%.
Orlando Garner, director de Crédito Público de la Secretaría de Finanzas, dice que la presente administración continuará con la política de endeudamiento, la que está vigente desde el 1 de enero de 2005, y que entre sus lineamientos destacan el limite máximo fijado y el grado de concesionabilidad de al menos 35% por cada préstamo.
Insostenibilidad
Los casi 800 millones de dólares que los organismos de crédito internacional han ofrecido a la administración Zelaya Rosales han despertado la atención de muchos sectores, ya que por un lado, estos han condonado casi 2,800 millones de dólares, pero a la par están ofreciendo nuevos créditos.
Garner dice que si se respetan los lineamientos de la política de endeudamiento no hay riesgo de que el país caiga en un nivel de insostenibilidad de su deuda pública externa. Según las autoridades de Finanzas, la capacidad financiera es otra clave para evitar que la deuda externa se convierta en una pesada carga para la economía, tal como ocurrió en el pasado.
Los organismos de crédito han ratificado que Honduras ha superado su problema de deuda externa, pero está obligada a mantener un manejo prudente en las nuevas contrataciones.