El árbitro ghanés Joseph Lamptey cobró el penal más impresentables de los últimos tiempo, tras sancionar la pena máxima luego que el balón rebotara en las rodillas de un defensor de Senegal.
Al minuto 41 de la primera parte el balón impactó en el zaguero Koulibaly del Napoli de Italia, el cuadro de la estrella verde reclamó con todo, pero el árbitro no dudó un minuto y sancionó luego de cometer un error brutal y teniendo una muy buena vista de la acción.
Sudáfrica se adelantó con esa pena máxima en el marcador y acabó ganando por 2-1 en el encuentro celebrado en el Estadio Peter Mokaba, una de las sedes del Mundial 2010.
Con este triunfo, Sudáfrica se sitúa con cuatro puntos, uno más que Senegal, tras las dos jornadas disputadas en el Grupo D de la zona de clasificación africana.