Por mucho que en ocasiones parezca real, la realidad es que las apuestas deportivas no son solo cuestión de suerte. Es cierto que en ocasiones pueden ocurrir imprevistos que cambian totalmente las premisas que existían antes de un determinado encuentro, pero, la realidad, es que el secreto para triunfar no es ese.
Los apostadores más exitosos no basan sus estrategias en suerte, lo hacen mediante pequeños ajustes que, a largo plazo, suponen una enorme diferencia.
Pero ¿cómo puedo hacer para conseguir mejores resultados sin variar mi estrategia considerablemente?
Enfócate en el valor, no solo en el ganador
El error de muchos apostadores a la hora de realizar una apuesta es centrarse única y exclusivamente en el ganador de un partido o evento. Si bien es cierto que el ganador tiene suma importancia, la realidad es que las apuestas deportivas no consisten en predecir resultados, sino de encontrar aquellas cuotas que ofrezcan valor.
Básicamente, tu estrategia no se debe centrar en quien gana o no, se trata de buscar en que cuotas una casa de apuestas ha puesto el valor por debajo del valor de mercado real (o por encima, depende de cómo lo mires) para así aprovecharte al máximo y conseguir ganancias.
Para encontrar estas “lagunas”, existen páginas como OddsPortal que ayudan a comparar las cuotas de diferentes casas de apuestas.
Cuida tu Bankroll
Uno de los mayores errores a la hora de apostar es no hacer un uso inteligente del bankroll. Para apostar, tener un plan estratégico es de suma importancia, casi más importante que donde apostar.
Para ello, existen algunas estrategias populares con el objetivo de cuidar el dinero disponible para apostar, haciendo un juego más inteligente en el que las emociones no entren en juego.
Apuestas planas: la forma más común de cuidar tu bankroll, consiste en apostar el mismo porcentaje de tu bankroll cada vez que juegues.
Criterio de Kelly: el criterio de Kelly es algo más complejo, ya que consiste en adaptar el porcentaje del bankroll a cada apuesta estudiando las posibilidades de la misma. Aun así, es un método sumamente eficiente.
Analiza todas las estadísticas
A la hora de realizar una apuesta deportiva, basar tu estrategia en únicamente la clasificación y los últimos resultados puede hacer que pierdas muchas más veces de las que ganes. Para ello, hacer un análisis más exhaustivo de los datos, ya sea variables como goles esperados (xG), puntos esperados u otras variables que puedan ser de gran importancia, puede cambiar radicalmente tus probabilidades de ganar, ayudándote a realizar apuestas mucho más inteligentes.
Controla tus emociones
Una mala gestión de las emociones puede ser el factor determinante entre ganar o perder una apuesta. Para ello, debes tratar de evitar las apuestas impulsivas mediante la correcta gestión de tus emociones.
¿Acabas de perder una apuesta? No busques recuperar el dinero de inmediato o sino perderás más.
¿Haces una apuesta por aburrimiento? Mejor busca reservar ese dinero cuando realmente quieras usarlo.
¿Apuestas a tu equipo? Se realista, no apuestes por tu juicio.
Establecerte límites y saber qué hacer en cada situación puede ser de grandísima ayuda a la hora de apostar, perdiendo mucho menos dinero y tomando decisiones mucho más coherentes.
Aprovecha los bonos de forma inteligente
Los bonos gratuitos pueden ser tanto nuestro mejor amigo como nuestro peor enemigo, de ahí que sea de suma importancia saber usarlos con cabeza. Para ello, analiza detalladamente el bono o la promoción, no apuestes compulsivamente simplemente para obtener dicho bono.
Revisar los términos y hacer un uso correcto de las bonos y promociones pueden ser un factor diferencial tanto para nosotros como jugadores como para nuestro bolsillo, que agradecerá que no se tomen decisiones compulsivas.
Pequeños cambios, grandes resultados
Para apostar y, sobre todo, para ganar, no necesitas crear una estrategia mágica con miles de horas de análisis, simplemente tienes que hacer una gestión inteligente y sin emociones de los recursos que tienes a tu disposición.
Para ello, trata d ebuscar siempre apuestas que aporten un valor añadido, trata siempre de gestionar tu dinero de forma equitativa, apostando únicamente tras un análisis algo avanzado de los datos. Además, trata de evitar las apuestas compulsivas y, sobre todo, haz buen uso de los bonos y promociones.
Siguiendo estos principios, conseguirás realizar estrategias mucho más inteligentes y, en el largo plazo, tanto tú como tu bolsillo lo notareis.
