Los jugadores del Real España pueden tranquilamente correr una maratón. Al menos da la impresión de que para eso los están preparando.
La Máquina sigue con los trabajos de pretemporada y la intensidad sigue incrementándose. El miércoles corrieron 5 kilómetros y ayer, 10.
Luis Fernando Velásquez, preparador físico del cuadro aurinegro, ha hecho que cada uno de los integrantes del equipo sude la gota gorda. El único cambio que hizo ayer por la mañana fue llevarlos a entrenarse en el campo de gol de la zona americana de La Lima.
“Estamos muertos. Mi cara lo refleja todo”, dice, extenuado, Aldo Oviedo, que busca en esta pretemporada la plenitud de condiciones para demostrarla en el torneo Apertura. Oviedo no es el único que sufre con esta exigencia; también lo hace Julio Palomo Rodríguez. “Lo que pasa es que en mis vacaciones estaba frío en Uruguay y no me entrené”, se excusó el sudamericano.
Palomo espera ganarse la confianza del nuevo entrenador Hernán Medford y viene a comenzar de cero.
“Independientemente de que la información entregada al profesor sobre lo que uno ha hecho, nuestra obligación es trabajar fuerte”, manifestó el uruguayo, que solo tiene dos días de estar entrenándose con el grupo.
Roberto Navas, juvenil que jugó en la Sub-23 de DC United y que estuvo en España, fue uno de los encargados de hablar con los medios. “
Me han dado la oportunidad de trabajar y espero quedarme”, señaló el jugador de 19 años que se desempeña como mediapunta. Los trabajos no acabaron ahí. Por la tarde, el conjunto practicó en su sede a puertas cerradas. Tenía previsto jugar fútbol. Real España espera, en los próximos días, hacer trabajos de playa.
Por el momento, el cuadro estará haciendo trabajos de exigencia física. Conforme baje la carga física, el club jugará una serie de amistosos, para lo que ya tiene pláticas avanzadas con algunos equipos chapines para foguearse.
Entre sus opciones se menciona a Xelajú, exclub de Hernán Medford, y el Heredia.
