Chile restó importancia y rechazó ayer las acusaciones de espionaje a los entrenamientos de la selección hondureña de fútbol, tal como lo planteó un miembro del cuerpo técnico del equipo centroamericano con el que medirá fuerzas en el Mundial de Sudáfrica 2010.
”No tiene ningún sentido preguntar en base a rumores. ¿Qué es lo que es espionaje en el fútbol? Por favor, no tiene ningún sentido gastar tiempo y energía en cosas que son tan absurdas”, dijo el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile, Harold Mayne-Nicholls.
El ayudante de la selección catracha, Alexis Mendoza, aseguró en declaraciones a un diario deportivo que la Roja espiaba el entrenamiento de los albiazules en su concentración de Fort Lauderdale, Estados Unidos.
“Nos informaron que nos vigilan rigurosamente, hay gente paraguaya, amiga de los chilenos y ahí se la juegan. Eso es así, en el fútbol siempre existen los compadrazgos. Esto eso es una realidad que no se puede esconder”, dijo Mendoza, asistente técnico del entrenador de Honduras, el colombiano Reinaldo Rueda.
Chile clasificó segundo en las eliminatorias sudamericanas a la cita planetaria, e integra el grupo H, junto con España, Honduras y Suiza.
