La leyenda del fútbol argentino Diego Maradona, deberá afrontar un largo tratamiento por su adicción al alcohol cuando deje el sanatorio donde fue operado por un hematoma de la cabeza hace una semana, un proceso que podrá realizar en casa, dijeron sus médicos este martes.
'Estamos evaluando los detalles para ver los pasos a seguir, lo que sí queda claro es que esto recién comienza y que tenemos que continuar con un tratamiento', dijo a la prensa Carlos Díaz, psicólogo y miembro del equipo médico que lo atiende en la clínica Olivos, del norte de Buenos Aires, adonde permanece internado.
Todo avanza hacia su traslado, probablemente esta semana, a una casa en el barrio privado Nordelta, en Tigre, a 30 km de Buenos Aires, para que Maradona se aloje cerca de donde vive su hija Gianinna.
'La idea es que Diego esté rodeado por las personas más cercanas porque los vínculos son los que van a poder ayudar a Diego a estar bien, sumado al seguimiento psicológico y médico', explicó Díaz al confirmar que el tratamiento será 'ambulatorio'.
Más temprano su médico personal, el neurocirujano Leopoldo Luque, dijo que el traslado de Maradona 'está prácticamente resuelto' en acuerdo con la familia.
'Todo va en línea con que (la recuperación) siga en una casa, en (el barrio privado) Nordelta es una de las ideas más fuertes', declaró Luque, a la radio argentina La Red.
Luque, afirmó que 'el estado de salud actual de Maradona es bueno' y admitió que 'se está barajando el alta'.
Maradona, de 60 años, fue hospitalizado el 2 de noviembre por un cuadro de anemia y deshidratación en La Plata, al sur de Buenos Aires.
Una tomografía reveló que tenía un hematoma subdural, por lo que se lo trasladó de urgencia a una clínica en Olivos (periferia norte de Buenos Aires) donde lo operaron con éxito el martes pasado.
Los argentinos le han dejado miles de mensajes de apoyo a Diego Maradona. Foto AFP.
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- Su voluntad, determinante -
El psicólogo destacó que Maradona 'está con muchas ganas de salir adelante'.'Todos conocemos la personalidad de Maradona y cuando uno habla de consumo problemático y adicción estamos hablando de una enfermedad que conlleva tratamientos complejos, pero lo importante es que tenga voluntad de cambio', subrayó.
Por su lado Luque afirmó que Maradona manifiesta su deseo de irse del sanatorio, pero ya no lo hace en forma agresiva como sucedió tras la operación, una reacción que los médicos consideraron producto de una abstinencia.
Según el médico, el cuadro de abstinencia 'es al alcohol, no a las drogas'.