Los conjuntos de calle para las temporadas primavera-verano se han inspirado en las tendencias que destacaron en la década de los 90. A continuación un resumen de los más destacados.
Bermudas anchas. Las bermudas anchas están ganando popularidad esta primavera-verano. Son cómodas y versátiles, perfectas para crear “looks” casuales y elegantes. Diseñadores como Valentino y Moschino han presentado bermudas anchas en sus colecciones.
Rosa suave. El rosa suave es uno de los colores destacados para esta temporada. Este tono delicado y femenino está presente en vestidos, blusas y accesorios, aportando un toque romántico a cualquier “outfit”.
“Leggings”. Los “leggings” siguen siendo una prenda esencial en el guardarropa. Esta temporada se llevan en colores vibrantes y con detalles como estampados y texturas. Son ideales para combinar con camisetas largas y chaquetas ligeras.
Mangas globo. Las mangas globo están de vuelta, añadiendo volumen y dramatismo a las prendas. Esta tendencia se ha visto en blusas y vestidos, ofreciendo un estilo llamativo y elegante.
Asimetría. Las prendas asimétricas están en auge, con cortes irregulares que aportan dinamismo y originalidad. Desde faldas hasta “tops”, la asimetría es una forma de destacar y añadir interés visual a los conjuntos.
Faldas “bubble”. Las faldas “bubble”, con su forma abombada, están regresando con fuerza. Son perfectas para crear “looks” divertidos y juveniles, y se han visto en las pasarelas de diseñadores como Zimmermann y Blumarine.
Micro mini shorts. Los micro mini shorts son una tendencia atrevida para esta primavera. Ideales para los días más cálidos, se pueden combinar con blusas sueltas y sandalias para un estilo fresco y moderno.
Todo en crochet. El crochet está dominando las tendencias, con prendas tejidas a mano que aportan un toque artesanal y bohemio. Desde vestidos hasta tops y accesorios, el crochet es una opción versátil y a la moda.


