San pedro sula. Se define como refrigerio saludable aquel que proporciona una fuente extra de energía a niños y adolescentes, útil para concentrarse y aprovechar al máximo el conocimiento.
Sugiere planearlo con tiempo, que sea sencillo, no se descomponga si está a temperatura ambiente, se empaque en recipientes reutilizables y que para su elección se involucre a los pequeños.
Por tanto, la merienda de tus niños es muy importante para su óptimo rendimiento escolar. Además de desnutrición y obesidad, los niños tienen riesgo de padecer “hambre oculta”, que es la carencia de vitaminas y otros micronutrientes esenciales, que atentan con el desarrollo y la inmunidad.
La fruta no debe faltar
Debe tener una porción de fruta (un puño) y verduras frescas (dos palmas de la mano ahuecadas); ambas, de temporada. El 44 por ciento de los niños del mundo no cuenta con esto.

Previene enfermedades
No olvide las oleaginosas (maní, soja o pistacho) y leguminosas (frijoles, lentejas, garbanzos y habas) en su preparación, pueden ser un acompañamiento.

Apórteles energía
Súmele un alimento con bajo contenido en grasa, con proteína y cereal integral, como quesadilla con pico de gallo, un mollete o sándwich de huevo.

Semillas y frutos secos
Otros alimentos ricos en proteína son las semillas, frutos secos, mantecas de frutos secos, patés vegetales, hummus y tofu. Estos le ayudarán a sentirse saciado.

Consejo
Escoja y cocine alimentos con menos sal. No ponga el salero en la mesa. Tenga a mano frutas y verduras cortadas como merienda en lugar de papas fritas o galletas saladas.