Para alcanzar los sueños debemos superar los obstáculos que encontramos en el camino, pero también debemos trabajar para lograrlos. Esta filosofía de vida ha permitido que Gabriela Castro, de 26 años, haya concluido su maestría en Japón y ahora continúe estudiando su doctorado en este país asiático.
La joven sampedrana, quien estudió Ingeniería en Computación en la Universidad Tecnológica de Honduras (UTH), recuerda que desde su adolescencia sentía una profunda admiración por la cultura japonesa.
“Me encantaban los videojuegos, la animación y la cultura”, relata mientras resalta otras características que valora de los japoneses como el respeto, el orden y la simplicidad. Ella sabía que estudiar en Japón era “la mejor forma de experimentar esta cultura”.
Proceso
Consciente de su propósito, Gabriela se inscribió en el Consulado de Japón para aprender japonés. La profesora de la clase fue quien le ayudó a conocer el proceso para aplicar a una beca en esta nación. Así que, después de llenar los formularios, participar en entrevistas y exámenes, finalmente logró ser escogida entre varios candidatos hondureños.
Con los conocimientos adquiridos en la UTH, el idioma inglés y un poco de japonés, Gabriela comenzó en 2022 una de las aventuras más emocionantes de su vida: estudiar en Japón. Su sueño comenzó a hacerse una realidad.
Vivir en Japón
Por sus conocimientos de inglés, Gabriela entró directamente a la maestría, ya que normalmente los alumnos, antes de iniciar las clases, tienen un año para aprender el idioma japonés.
Confiesa que al principio se sintió un poco asustada; sin embargo, poco a poco se fue adaptando al nuevo ambiente, “sabía que era algo que podía manejar, porque tengo el conocimiento para poder hacerlo”, expresa con seguridad.
En marzo de 2024, Gabriela obtuvo la maestría en Ingeniería en Información y Comunicación y en abril del mismo año, comenzó su doctorado en Ingeniería Cocreativa, ambas en el Instituto Tecnológico de Kitami, Japón.
Una formación sólida
Gabriela reconoce que estos últimos años han sido muy emocionantes. “Todavía me siento como en una nube”, expresa.La joven se siente orgullosa de la formación recibida en UTH, ya que en ningún momento se sintió en desventaja para avanzar en sus clases.
De sus años de formación, recuerda a los catedráticos, la doctora Gizeth Aleli Castro, los ingenieros Norman Alberto Cubilla y Edwyn Roberto Sanders, quienes le inspiraron para “amar la ingeniería en computación, la programación y las redes”. Reconoce que ellos la impulsaron a seguir aprendiendo sobre este campo.
Investigación
Cuando finalice el doctorado en marzo de 2027 Gabriela planea continuar en Japón, ya que quiere ser parte del área de investigación en una compañía de automóviles.
A pesar de que en Honduras existen pocas empresas que manejan estas áreas, en el futuro desea poder implementar su investigación en el país. Afirma que le gustaría contribuir al progreso de la nación. “El punto de esta beca es que yo pueda ser un puente entre Honduras y Japón”, un sueño más que está decidida a cumplir.