Según el diccionario de la Real Academia, sofreir es freir ligeramente alimentos y sus condimentos.
Llamamos sofrito a los alimentos que sofreimos ligeramente.
éste constituye la base fundamental con que se elaboran la mayoría de los platos guisados de la cocina mediterránea. Se puede decir que no hay guiso sin sofrito.
Es una de las salsas básicas y necesarias en los guisos de pescado, carne, pasta y arroz.
¿Cómo prepararlo?
Pique bien una cebolla y póngala a calentar en una freidera, con un generoso chorro de aceite de oliva. Cuando empiece a dorarse, añada el tomate cortado en pedazos pequeños.
El sofrito de cebolla y tomate es la base de multitud de platos.
A este sofrito básico, se le puede añadir pimiento verde o rojo, ajo, zanahorias, etc.
Se freirán con la cebolla, para añadir un poco más tarde el tomate.
Al final, el sofrito se puede enriquecer con distintos condimentos como hierbas aromáticas que se añadirán el último momento.
El sofrito en los guisos
Un guiso de carne o pescado hágalo de la siguiente manera: enharine ligeramente las piezas de carne, con esto conseguirá que la pieza esté un poco más crujiente y que la harina absorbe la salsa del sofrito.
En una freidera con aceite de oliva, dórela e introduzca el sofrito.
El resultado será un guiso súper delicioso.
Beneficios
Si hace uso de los sofritos, obtendrá deliciosos platillos cocidos en menor tiempo.
Otros efectos
Resulta satisfactorio hacerlos en casa, pues su sabor cambia.
