San Pedro Sula, Honduras.
Con conocimiento de causa, el guardia de seguridad que era buscado por la Policía por el asesinato de una niña de 12 años, al ser capturado confesó el crimen.
La detención fue por una operación de seguimiento de equipos de la sección de Homicidios de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), quienes desde el día que Karla Patricia Guzmán Castro (12) apareció muerta, comenzaron la búsqueda del sospechoso.
El detenido fue identificado como José Manuel Uclés Gonzales (27), guardia de seguridad, contra quien hay pruebas testificales y técnicas que lo señalan como el autor del repudiable crimen.
Uclés Gonzales confesó: “Yo la maté, no sé qué pasaba por mi cabeza porque también tengo hijos, este es mi fin”.
Con conocimiento de causa, el guardia de seguridad que era buscado por la Policía por el asesinato de una niña de 12 años, al ser capturado confesó el crimen.
La detención fue por una operación de seguimiento de equipos de la sección de Homicidios de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), quienes desde el día que Karla Patricia Guzmán Castro (12) apareció muerta, comenzaron la búsqueda del sospechoso.
El detenido fue identificado como José Manuel Uclés Gonzales (27), guardia de seguridad, contra quien hay pruebas testificales y técnicas que lo señalan como el autor del repudiable crimen.
Uclés Gonzales confesó: “Yo la maté, no sé qué pasaba por mi cabeza porque también tengo hijos, este es mi fin”.
La detención fue ayer a las 11:20 am, en una cuartería de la colonia Libertad de Anach, sector López Arellano, del municipio de Choloma, hasta donde llegaron los uniformados y en un cuarto encontraron refugiado al supuesto asesino.
La DPI lo capturó en el municipio de Choloma.
|
El crimen de la menor fue el pasado jueves, su cuerpecito fue hallado dentro de una bolsa negra, en la entrada a unos apartamentos situados en el barrio Río de Piedras entre la 5 y 6 calles y la avenida Circunvalación atrás del local adonde funciona una farmacia.
La familia buscaba a la niña desde la tarde del miércoles. Los hermanos de Karla manifestaron que el guardia les dijo la tarde del miércoles que se fueran a dar una vuelta mientras su hermana aseaba los baños, cuando regresaron por ella, el celador les aseguró que ya se había ido. Los niños comentaron que desde hace al menos dos semanas que salieron de vacaciones de la escuela se dedicaron a vender frutas en la calle para ganar dinero y poder comprar ropa para estrenar en las fiestas navideñas.
La familia sepultó a Karla el pasado viernes, con la ropa nueva que estrenaría para la fiesta de Navidad. Uclés fue remitido ayer mismo a la Fiscalía de turno para el proceso de investigación. Los parientes de la menor piden que no dejen libre a Uclés por el hecho despiadado que cometió.