La policía y el Juzgado de Policía Municipal realizaron en la noche del martes operaciones en la ciudad para rescatar a menores, víctimas de explotación sexual o en riesgo social.
Como resultado cerraron un negocio situado frente al Colegio de Abogados de Honduras en el que estaba una abogada ingiriendo alcohol, acompañada de amigos y, sorprendentemente, de su hijo de cinco años.
La policía la citó para que se presentara al juzgado de policía ayer, confirmó el juez José Cardona, que dirigió la operación.
En la zona sur el primer lugar inspeccionado fue Fiesta Mexicana y, posteriormente, el centro nocturno Ilusiones.
El juez de policía informó que tenían denuncias de que en Ilusiones hay menores prostituyéndose, pero no logró constatar nada.
Clave
Las patrullas fueron a distintas colonias como La Pradera, Flor del Campo, Loarque, entre otras.