Las autoridades policiales investigan si el asesinato del dueño de una rentadora de vehículos y su guardaespaldas, la tarde del sábado en el bulevar Fuerzas Armadas, fue el producto de una guerra de carteles del narcotráfico.
El empresario Luis Gerardo Lanza Turcios y su guardaespaldas murieron al instante mientras se conducían en una lujosa Toyota Prado, con placas PP-02074, la que recibió más de 80 impactos de Ak-47.
Otra hipótesis que maneja la policía es que este crimen pudo ser el resultado de un ajuste de cuentas por pleitos de negocios.
Lanza Turcios tenía 42 años, era originario de Olancho y residía en la colonia Lomas de Toncontín.
Su guardaespaldas Orlando Enrique Padilla Espinal, de 23 años, recién había llegado de Olancho.
El hecho criminal ocurrió a las 4.30 de la tarde. Testigos informaron que les dispararon sicarios que se conducían en dos vehículos. El cadáver de Lanza Turcios quedó frente al volante y el de Padilla en el asiento trasero. Los hechores se fugaron.
Ayer un técnico de la Dirección General de Investigación Criminal había marcado 90 perforaciones de bala sólo de entrada y faltaba contabilizar las de salida.
Andaban armados
Cuando los empleados del Ministerio Público y un equipo de la Dgic realizaron el reconocimiento legal confirmaron que cada uno de los fallecidos portaba una pistola 9 milímetros.
Lanza Turcios era propietario del negocio 24-7 Renta Car ubicada cerca del aeropuerto Toncontín, donde la policía había ejecutado allanamientos por sospechas de lavado de activos provenientes del narcotráfico y por otras actividades ilícitas.
Estas acciones policiales se realizaron el 16 de diciembre de 2006 en la rentadora y en Choluteca simultáneamente.
En la operación se capturaron a seis personas, entre ellas, Lanza Turcios. En el acto se decomisaron tres kilos de cocaína y 28 carros.
También fueron capturados Walder Gerardo Lanza Alemán, Jimmy Arturo Méraz Ochoa, Fredy Leonel Lanza Turcios, Jenifer Mariela Alvarado y Edwin Francisco Rivera. Éstos fueron liberados en días posteriores. Se informó que en la prueba de la droga, resultó ser harina.
Amenazas
Las autoridades competentes reconocen el cadáver del guardaespaldas de Luis Lanza.
Fue Fredy Leonel Lanza Turcios, hermano del empresario, quien mencionó la tarde del sábado los nombres de dos dueños de rentadores como responsables del crimen. La hipótesis que cobra fuerza es una supuesta enemistad que habría nacido entre los hermanos Lanza y los dueños de dos rentadoras, éstas le alquilaban carros a la policía.
Según los informes recibidos, el propietario de la rentadora que alquilaba sus carros a la policía también fue objeto de un atentado criminal del cual resultó ileso, hecho acontecido días después de la captura de Lanza.
El ahora occiso había sido puesto a la orden de los tribunales de justicia junto a tres paquetes de la droga y los automóviles, pero en cuestión de días fueron liberados por los juzgados.
Una fuente de inteligencia aseguró que en los laboratorios de Medicina Forense se constató que la cocaína era pura, pero, extrañamente, en los tribunales de justicia 'se transformó en harina'.
Del juzgado se ordenó a la Dgic devolver los vehículos, aunque no se había hecho la requisa para determinar si tenían reporte de robo o irregularidades en la serie.
Ayer trascendió que en este caso se habrían movido unos 20 millones de lempiras, lo que originó la muerte de un personaje ligado a los entes judiciales por mala distribución; la información no ha sido confirmada.
La policía investiga si este caso tiene conexiones con el secuestro del empresario guatemalteco Mariano Miguel Santizo Minera, liberado el 22 de marzo. El empresario supuestamente llegó al país a vender un vehículo de su propiedad; pero en vez de que le pagaran por su vehículo, fue secuestrado.
Logró liberarse porque en la casa donde lo tenían retenido, encontró un recibo con la dirección. Así logró dar la ubicación a su familia, quien dio parte a las autoridades policiales.
Todavía no hay capturas de autores del crimen
Tegucigalpa. Un equipo de la Dgic seguía ayer tras la pista de los autores materiales de este otro atentado criminal que ha engrosado la lista de víctimas que registra la violencia en el territorio. A pesar de que dolientes revelaron nombres de presuntos sospechosos, hasta ayer no se había ejecutado ningún requerimiento.
El mediodía de ayer los dolientes esperaban en la morgue para retirar el cadáver de Luis Gerardo Lanza.
