Mientras reclamaba el cuerpo de su hijo de 14 años en la morgue judicial de Tegucigalpa, madre del menor, recordaba las últimas palabras que él dijo. 'Mamá, piérdase que me la van a matar'.
La madre entre el llanto comentó que a Wilmer Noel Aguilera Galo de 14 años ya lo habían amenazado en varias ocasiones, por eso se fue a vivir a otra parte y aunque él la alertó de que a ella le querían hacer daño, nunca imaginó que su hijo sería la víctima.
'Constantemente recibía amenazas a muerte, la última vez que lo vi fue hace un mes, estaba en la colonia Rosa Linda', dijo la madre.
El jovencito, a quien conocían como 'El mudo', fue abatido a balazos en la colonia El Carrizal de Tegucigalpa, en la zona central de Honduras.
Las cifras de violencia y de criminalidad se siguen manteniendo en Honduras, pese a que las autoridades policiales afirman que han tomado acciones para contrarrestar este flagelo.
El 84% de los muertos por violencia son jóvenes entre 14 y 35 años de edad, lo que indica que el ser joven varón es un factor de riesgo en Honduras, citó la directora del Observatorio, Migdonia Ayestas.