Mientras disfrutaba del aire fresco y la sombra de los árboles en el solar de su casa fue asesinado de múltiples balazos Miguel Ángel Andrade, 38.
El ahora occiso era originario y residente en la comunidad de Aguas Frías Meámbar, en el municipio de Siguatepeque, y se dedicaba a la agricultura.
Según testigos, la víctima se refrescaba en el solar en la parte trasera de su vivienda, al cual llegaron varios sujetos que discutieron con Andrade y le dispararon en varias ocasiones.
El crimen ocurrió por la mañana y el cuerpo fue trasladado a la morgue capitalina para hacerle la autopsia.
Crimen
El informe proporcionado por la Dirección Nacional de Investigación Criminal, Dnic, de Siguatepeque revela que el ahora fallecido recibió balazos en el costado derecho del pecho, el lado izquierdo de la espalda y del tórax, en la mandíbula, el pecho y la espalda.
En el mismo documento se revela que en la escena del crimen se encontró una pistola tipo revólver con cinco proyectiles en su cargador. Se tomó nota de que una de las balas estaba en el suelo, lo que hace suponer que la víctima estaba cargando la pistola para defenderse, pero no pudo disparar en contra de sus asesinos.
A la morgue llegaron familiares de Andrade, que aseguraron que ignoran por qué asesinaron a su pariente, pues no se metía en problemas con nadie. Señalaron que no escucharon la disputa entre la víctima y los asesinos, sino que unos vecinos les dijeron que estaban discutiendo.
'Sólo escuchamos los tiros y cuando salimos él ya estaba muerto', dijo un doliente.
El levantamiento del cuerpo fue realizado por agentes de la Dnic, ya que los encargados de Medicina Forense no pudieron llegar a la zona.
Investigación
Los parientes de Andrade pidieron que se esclarezca el crimen, ya que 'no fue a un animal a quien asesinaron'.
También exigieron que al encontrar a los culpables se les aplique el peso de la ley.
