Justicia pidieron los parientes de la joven Saylee Yankel Martínez Suazo (de 25 años) tras confirmar que su muerte se trató de un homicidio mediante los resultados de la autopsia.
El reclamo lo hicieron durante el sepelio en el cementerio general de la aldea Corozal de esta ciudad la tarde de ayer martes, mientras caía un fuerte aguacero en el litoral.
El cadáver llegó ayer mismo procedente de San Pedro Sula hasta donde fue llevado para practicarle los exámenes correspondientes y determinar las causas de su deceso.
La joven estudiante de enfermería fue encontrada sin vida el sábado 4 de noviembre en el interior de su apartamento, ubicado en la colonia Pizatti de La Ceiba.
La ahora occisa residía sola y fue hallada por la propietaria de los cuartos al llamarle la atención que Saylee Martínez no salía de su habitación por varios días.
Al acercarse a la puerta de acceso sintió un olor fétido y llamó a la Policía, quienes encontraron el cadáver putrefacto en la cama. La puerta de la habitación que alquilaba estaba cerrada y sin señales de haber sido violentada
Balazo
Según dio a conocer Richard Martínez, primo de la joven estudiante de enfermería, a Diario LA PRENSA, “ella murió de un disparo en la cabeza. Eso es lo que arroja la autopsia, se encontró un casquillo de bala en el cráneo que le provocó la muerte a la prima”. Por ahora no tienen sospechas de nadie ya que la joven fallecida nunca les dijo que tuviera problemas con alguien.
Saylee Martínez era madre soltera y deja una niña de 6 años que recién se la había entregado al padre de la menor para buscar un empleo como enfermera. La pareja se había separado desde hacía varios años y se conoció que no estaban en conflicto.
“De mi parte no sospecho de nadie, es posible que sea un conocido el responsable porque si apareces muerto en el interior de tu casa y la puerta está cerrada eso da a pensar”, agregó Richard Martínez, quien guarda buenos recuerdos de ella.
