La Fuerza Interagencial inició sus operaciones de resguardo y seguridad en los aeropuertos de Honduras como medida para combatir el narcotráfico y el crimen organizado.
La medida se aprobó por el constante uso de las terminales aéreas para el tráfico de drogas y dinero producto del lavado de activos.
Julián Hernández, vocero de la Policía Nacional de Honduras, afirmó que 'la unidad especial estará a cargo de las inspecciones, tanto entradas y salidas de las maletas, de igual manera de cualquier situación que se dé en sentido de seguridad', explicó.
Edgardo Maradiaga, gerente de Interairports manifestó que 'la Fuerza Interagencial estará a cargo de la seguridad con carácter indefinido para garantizar la seguridad de la población nacional y los extranjeros que ingresan y salen del país por los aeropuertos'.
Julián Hernández agregó que 'el concesionario está realizando una labor de supervisión de que la coordinación y apoyo para que la Fuerza Interagencial sea total y completa a fin de que pueda garantizarse la seguridad nacional en todas las instalaciones aeroportuarias del país'.
La Fuerza Interagencial fue organizada por orden directa del presidente Juan Orlando Hernández para revisar y ver la situación de los aeropuertos de Honduras.
La unidad estará integrada por unos 300 hombres y tendrá el apoyo del Ejército y de la Fuerza Aérea Hondureña.
El pasado 4 de febrero, el gobierno de Honduras determinó asumir la responsabilidad de la seguridad de los aeropuertos internacionales Toncontín en Tegucigalpa; Ramón Villeda Morales de San Pedro Sula; Golosón en La Ceiba y Juan Manuel Gálvez de Roatán, mediante la Fuerza Interagencial.
La fragilidad del sistema de seguridad en los aeropuertos hondureños fue evidenciada en los últimos meses, ya que a finales del mes pasado, dos hondureñas fueron detenidas en el aeropuerto Tocumén de Panamá con más de 100,000 dólares ocultos en sus vaginas. Ambas mujeres salieron del aeropuerto de San Pedro Sula.
Unas semanas antes, el 12 de enero, tres hondureños fueron detenidos en la terminal panameña con más de siete millones de dólares en ocho maletas.