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Hallan sin vida a gerente de empacadora de camarones

  • 12 junio 2015 /

Tegucigalpa, Honduras.

Ayer fue encontrado el cadáver del gerente financiero de la empresa empacadora de camarones Deli, Josué Paúl Silva Rodríguez, raptado el pasado martes en las inmediaciones del anillo periférico de la ciudad de Choluteca.

El cuerpo fue encontrado en un potrero cercano al rastro privado de destazadero de ganado vacuno Carnilandia, hasta donde se presentaron las autoridades competentes al reconocimiento legal, así como las investigaciones preliminares en torno al hecho criminal.

Silva Rodríguez murió por heridas de bala en la cabeza, según confirmó la Policía a la hora del levantamiento.

El cadáver fue trasladado a la morgue de Medicina Forense de la capital para realizarle la autopsia y determinar el tiempo de muerte y las causas.

Mientras tanto, un equipo de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) hace las averiguaciones orientadas a identificar a los responsables del hecho y a establecer los posibles motivos.

Rapto y asesinato

El infortunado ejecutivo de la empresa camaronera había sido privado de su libertad el martes de la semana anterior por malhechores no identificados alrededor de las 6:00 pm en el momento que salía de su trabajo y no volvieron a saber nada sobre su paradero, según informó la Policía.

La Policía y familiares iniciaron la búsqueda desde el día que ocurrió el rapto y horas más tarde encontraron el automóvil en que Silva se conducía, abandonado en un lugar solitario de la zona.

Fue hasta ayer en horas de la mañana que unos campesinos que pasaban por el lugar sintieron un mal olor, por lo que decidieron acercarse y descubrieron el cuerpo putrefacto de Silva Rodríguez debajo de unos arbustos.

La Policía fue alertada por los labriegos sobre el macabro hallazgo, por lo que varios agentes se movilizaron de inmediato hasta la escena del crimen en una patrulla. Según lo informado por las autoridades policiales, en ningún momento los raptores se comunicaron con la familia para pedir rescate, por lo que presumen que no era dinero lo que buscaban, sino quitarle la vida.

Hasta ayer, la Policía no tenía ninguna pista de los delincuentes ni manejaba una hipótesis en torno a la posible causa del crimen.