El sacrificio que hacía por buscar el triunfo de su querido equipo, Real Villarreal, fue opacado por siete inadaptados sociales pertenecientes a una mara que le quitaron la vida en pleno partido.
El joven Wilmer Edgardo Valladares Nolasco, de 21 años, fue atacado a balazos ayer en la tarde en un campo de la colonia Las Brisas, al sur de la capital, y expiró en la sala de urgencias del Hospital Escuela.
El sangriento suceso se registró cuando el infortunado participaba en un campeonato en el que su equipo ganaba por un gol a cero.
De repente siete miembros de una mara interrumpieron el juego ingresando a la cancha directamente a dispararle, situación que generó un ambiente de temor entre los asistentes al juego.
Valladares cayó herido y aún con vida fue trasladado al principal centro asistencial capitalino en una patrulla, pero expiró al llegar.
La Policía realizaba un operativo en la colonia Camosa con el fin de capturar a los victimarios.
