La Ceiba, Honduras
Un video de una de las cámaras de vigilancia de la gasolinera Suyapa, de La Ceiba, captó el momento en que varios sujetos fuertemente armados protagonizaron una balacera en la que perdieron la vida dos guardias de seguridad en ese lugar.
Las imágenes muestran el momento en que los criminales llegan al negocio en una camioneta gris con vidrios polarizados a eso de las 5:57 am del viernes, según el conteo del video que fue publicado en las redes sociales. El ataque dura menos de un minuto.
En la balacera perdieron la vida los guardias de seguridad Martín Eduardo Morales Sánchez (41) y Wilfredo René Torres Padilla (40), justo en el momento en que ambos iniciaban su turno de trabajo en esta estación de servicio ubicada a orillas de la CA-13, frente a la entrada de la colonia Suyapa.
Las escenas empiezan con la llegada del vehículo, desde donde se bajan tres sujetos disparando hacia las oficinas administrativas y la zona de servicio de bebidas de este local mientras la camioneta avanza con las puertas abiertas, segundos después se baja una cuarta persona con camisa blanca disparando en la misma dirección.
A esa hora de la mañana apenas se ve gente caminando y carros circulando por la vía. El video muestra a los criminales con el rostro cubierto y con chalecos antibalas; uno vestido con camisa de rayas blancas y rojas es el que más permanece durante el video y se le ve montando guardia mientras hace disparos en distintas direcciones, es el único que porta una arma larga, el resto se les ve con pistolas. En medio de la balacera se ve cómo un empleado de esta gasolinera sale en veloz carrera buscando protección, mientras el individuo que portaba el fusil le daba la espalda, segundo después se da vuelta y apunta hacia él, pero cambia de dirección y descarga su arma.
Las autoridades policiales siguen trabajando en las investigaciones; aunque se han hecho operativos en zonas críticas de esta ciudad no han podido dar con los responsables de este doble crimen y con la camioneta en que se transportaban los hechores.
Por la forma en que se dieron los hechos, las investigaciones siguen apuntando que el hecho iba dirigido a las víctimas; aunque a uno de los celadores le llevaron su arma.
