Los escándalos siguen empañando la imagen de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras. Ayer se detectó un equipo que empleados utilizaban para el tráfico gris.
La rectora de la alma máter, Julieta Castellanos, expresó que recibió una llamada de la sección técnica de Hondutel para informarle de indicios de tráfico ilegal de llamadas desde el interior del centro educativo y que estaban pidiendo autorización para investigar.
“Aunque la Universidad estaba cerrada, había un uso alto de las líneas internas. Una persona estaba utilizando 24 líneas telefónicas y en las inspecciones se encontró todo ese equipo”, señaló Castellanos.
Añadió que un empleado del centro educativo llamó para preguntar si había energía eléctrica, pues uno de los equipos que tenía en casa, conectado con los de la universidad, no estaba funcionando.
“Los técnicos y los fiscales ya lo habían desactivado. Le pedimos que viniera y lo capturaron”, dijo. Se trata de Jorge Marcelo Marceti Márquez, jefe de la sección de la planta telefónica de la Universidad, que es el supuesto responsable. En dicha unidad trabajan seis personas más, informó Castellanos.
“No vamos a permitir ningún acto indebido en la Universidad, no habrá clases mañana -hoy- ni personal porque queremos que los fiscales, jueces y la Policía hagan una inspección detenida”, manifestó la rectora.
Anunció que las clases podrían empezar el miércoles por la inspección y el proceso de limpieza debido a la suciedad que dejaron los manifestantes.
