Tegucigalpa, Honduras.
Varias líneas de investigación han abierto las unidades de Inteligencia en torno al crimen del empresario Orlando Alexander Berríos Escoto, de su esposa Clara Francis Melara y su hija Alexandra Berríos Melara.
Los cuerpos sin vida de madre e hija fueron descubiertos la noche del jueves de la semana pasada en su casa en residencial Las Cumbres, mientras que el de Berríos Escoto apareció putrefacto en el municipio de Jano, Olancho.
El cadáver del empresario fue retirado de la morgue el pasado martes, mientras que familiares seguían con los trámites ayer para sacar el de las dos féminas para trasladarlos a Estados Unidos, según confió una fuente.
Hasta ayer, la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) no manejaba una hipótesis clara en relación al triple crimen, pero equipos siguen con las pesquisas orientadas a esclarecer el caso.
El jefe de la DNIC, comisionado Leandro Osorio, reveló ayer que hay avances en las investigaciones que realizan en conjunto con el Ministerio Público y que esperan pronto dar con los responsables del hecho criminal.
Agregó que a raíz de la muerte de Berríos Escoto se han abierto otras líneas de investigación y que siguen con la recolección y cotejamiento de información en las diferentes escenas del crimen. Prosiguió que en la camioneta Land Cruiser de Berríos Escoto se encontró sangre y elementos pilosos. También en el turismo de la joven Alexandra hallaron evidencias que lo vinculan en la misma escena.
Al ser consultado sobre el paradero de los miembros de la seguridad y de la trabajadora de la familia, respondió que se sigue un proceso de investigación, pero prefirió no profundizar en detalles para no entorpecer el trabajo de los agentes asignados al caso.
“Esperemos que en el transcurso de la semana podamos tener más información, más elementos importantes, tanto científicos como a través de fuentes humanas”, expresó.
En relación al car wash y a otros negocios de Berríos Escoto, el jefe policial reveló que hacen las coordinaciones con la Fiscalía para proceder a las inspecciones con equipos especializados.
Al preguntarle sobre la utilización de algunos centros de lavado de vehículos en venta de droga y otras actividades delictivas, contestó que realizan las investigaciones del caso.
“No descartamos que son lugares propicios para poder vender; con esto no quiero decir que todos, sin embargo, se están investigando algunos lugares que posiblemente podrían estar vinculados a la venta de droga”, apuntó.
El oficial mostró ayer documentos que acreditan que Berríos Escoto tenía antecedentes penales por diversos delitos desde 2005 hasta 2010, y una orden de captura por robo de automóviles, falsificación de documentos públicos y alteración de series.
Varias líneas de investigación han abierto las unidades de Inteligencia en torno al crimen del empresario Orlando Alexander Berríos Escoto, de su esposa Clara Francis Melara y su hija Alexandra Berríos Melara.
Los cuerpos sin vida de madre e hija fueron descubiertos la noche del jueves de la semana pasada en su casa en residencial Las Cumbres, mientras que el de Berríos Escoto apareció putrefacto en el municipio de Jano, Olancho.
El cadáver del empresario fue retirado de la morgue el pasado martes, mientras que familiares seguían con los trámites ayer para sacar el de las dos féminas para trasladarlos a Estados Unidos, según confió una fuente.
Hasta ayer, la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) no manejaba una hipótesis clara en relación al triple crimen, pero equipos siguen con las pesquisas orientadas a esclarecer el caso.
El jefe de la DNIC, comisionado Leandro Osorio, reveló ayer que hay avances en las investigaciones que realizan en conjunto con el Ministerio Público y que esperan pronto dar con los responsables del hecho criminal.
Agregó que a raíz de la muerte de Berríos Escoto se han abierto otras líneas de investigación y que siguen con la recolección y cotejamiento de información en las diferentes escenas del crimen. Prosiguió que en la camioneta Land Cruiser de Berríos Escoto se encontró sangre y elementos pilosos. También en el turismo de la joven Alexandra hallaron evidencias que lo vinculan en la misma escena.
Al ser consultado sobre el paradero de los miembros de la seguridad y de la trabajadora de la familia, respondió que se sigue un proceso de investigación, pero prefirió no profundizar en detalles para no entorpecer el trabajo de los agentes asignados al caso.
“Esperemos que en el transcurso de la semana podamos tener más información, más elementos importantes, tanto científicos como a través de fuentes humanas”, expresó.
En relación al car wash y a otros negocios de Berríos Escoto, el jefe policial reveló que hacen las coordinaciones con la Fiscalía para proceder a las inspecciones con equipos especializados.
Al preguntarle sobre la utilización de algunos centros de lavado de vehículos en venta de droga y otras actividades delictivas, contestó que realizan las investigaciones del caso.
“No descartamos que son lugares propicios para poder vender; con esto no quiero decir que todos, sin embargo, se están investigando algunos lugares que posiblemente podrían estar vinculados a la venta de droga”, apuntó.
El oficial mostró ayer documentos que acreditan que Berríos Escoto tenía antecedentes penales por diversos delitos desde 2005 hasta 2010, y una orden de captura por robo de automóviles, falsificación de documentos públicos y alteración de series.