Tegucigalpa, Honduras.
Pretendían burlar los mecanismos de seguridad instalados en la Penitenciaria Nacional de Támara al intentar introducir al menos 30 libras de marihuana, pero los miembros de la Fuerza Nacional de Control de Centros Penitenciarios lograron interceptar el alucinógeno que estaba distribuido en varios paquetes ocultos en tres bolsas de cemento.
Al estilo de los carteles de la droga, algunos de los paquetes estaban marcados con una inicial, entre ellas: “A”, “K”,”N”, “O”, “Z”, por lo que se presume que la droga iba dirigida a cinco internos, pero será la investigación que se realiza por parte de las autoridades competentes la que determine dicho extremo.
El hallazgo
Todo lo que ingresa a la prisión debe pasar por el Body Scann o el Spectrum 100/100, fue en ese momento cuando detectaron objetos extraños dentro de las bolsas conteniendo cemento.Lea: Liberan a conductor de vehículo participante en muerte de cinco garífunas
Los agentes informaron a las autoridades del establecimiento y realizaron las coordinaciones con el personal de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) para que se inicie el proceso investigativo, además de inspeccionar las bolsas. Al abrirlas se encontró la droga distribuida en paquetes pequeños y marcadas con algunas de las iniciales.
Las autoridades informaron que el cemento iba dirigido hacia el módulo de 'Casa Blanca', luego que realizaron la solicitud exponiendo como propósito mejorar las aulas de clase que funcionan al interior de ese espacio y descubriendo en tres de ellas al menos 30 libras de marihuana que ya están en su poder.
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Como parte del proceso detuvieron para efectos de investigación al conductor de la volqueta, también se extiende a los privados de libertad que habrían solicitado el material para el mejoramiento de las aulas de clase y así poder deducir la responsabilidad del caso.
Antecedente
En el módulo de sentenciados II o “Casa Blanca”, durante las inspecciones realizadas la semana pasada encontraron una caleta en la cual ocultaban al menos 30 libras de supuesta marihuana, así como varias armas de fuego de diferentes calibres, entre otros objetos de uso prohibido para la población penitenciaria.  La marihuana iba oculta dentro de estas bolsas de cemento, las cuales fueron revisadas en la entrada de la cárcel.
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