El lunes pasado arribó a Honduras, por primera vez, el director de la escuela y coro infantil del Teatro de la Ópera de Roma, José María Sciutto, considerado una eminencia de la música.
La visita la realizó para impartir, durante tres días, de manera gratuita un taller que pretende cambiar la metodología de formar coros para personas que tengan base musical, los cuales realizarán un concierto en vivo desde las 7:30 pm hoy para invitados especiales en la escuela Victoriano López.
“Este tipo de cosas es una ayuda a la sociedad, ya que el niño que sabe música evita irse por malos caminos y prácticamente sabe integrarse en grupos, y eso se aplica en la sociedad”, asegura Daniel Montes, director de la escuela Victoriano López.
En exclusiva con LA PRENSA, José María Sciutto habló de su motivación por visitar nuestro país.
Tuve el honor de conocer al maestro Daniel Montes. Él fue alumno mío en Roma y tiene gran talento musical y una gran capacidad de organización y de crear cosas. Él llegó a Honduras hace un año y me hablaba de las maravillas de la gente de aquí, sobre todo de la capacidad musical que tienen, por lo que me pidió que viniera. Acepté, y estoy acá para dar un curso que trata de la dirección de coros de niños y jóvenes, en el que participan directores de coro y músicos, en general a quienes les interese trabajar con los coros. En el curso, yo propongo un método donde se aprende con la misma música, lo chicos cantan, aprenden a leer música, después aprenden a colocar la voz y lo último es cantar a varias voces. Todo eso se enseña junto, pero tiene un objetivo musical, y es que se trabajan todas esas cosas y luego se canta en un concierto.
Es la posibilidad de crear en Honduras una red de coros de niños y jóvenes coordinados por la Victoriano. Crear coros en las distintas ciudades, en escuelas, parroquias, en distintos lugares donde se reúnen los niños y jóvenes. Y hacer festivales de coro, como los que he hecho en Italia, donde se presentan hasta mil jóvenes en estadios.
Claro que sí. Porque eso va a subir mucho el nivel coral del país. Porque esos niños van a ser jóvenes y luego adultos, entonces se crea como una escuela. Entonces quiero contribuir, en lo posible, a subir ese nivel que tienen en esta área.
Hay mucho por hacer, pero el maestro Montes va por el camino justo. Lo que sí me parece importante es que tenga el apoyo, ya que hay que hacer algunos cambios como modernizar un poco los criterios pedagógicos. Lo más importante para un joven es tocar en una orquesta. No podemos pensar en formar solistas. Como músicos tenemos que tratar de crear grupos, pues el coro integra a los muchachos.
Hay un milagro. Hay dos países que han empezado con esta modernización, que no es tanta, sino volver un poco a lo antiguo. En la época de Vivaldi no se estudiaba un año, las escalas musicales empezaban tocando y a medida que lo iban haciendo lo perfeccionaban. En la actualidad es al revés. Con este movimiento, que primero nació en Costa Rica, pero no se conoció tanto, y después en Venezuela, con lo que se llama “El sistema”, que creó el maestro José Antonio Abreu, tuvo la oportunidad de organizar esta idea que digo. No hay un lugar en Venezuela donde no haya una banda o una orquesta y un coro. Hay un millón de jóvenes que estudian música con este criterio, y los solistas han salido también automáticamente.
Lo que se está haciendo en esta escuela es una semilla que hay que regarla para que crezca. Desde el punto de vista pedagógico es muy importante lo que pasa aquí en San Pedro. Si se propaga se puede crear un buen movimiento musical de jóvenes.
José María Sciutto
69 años
País: Argentina
Profesión: Director de orquesta y coros
Instrumentos que ejecuta: Violín, violonchelo, fagot, oboe, piano, trombón y varios instrumentos antiguos como la flauta dulce.
Estudió Dirección de orquesta en Argentina desde los 19 años. Luego estudió en Bellas artes y dirigió muchos coros de niños y orquestas en Argentina. Después se fue a trabajar un año a Italia y ganó un concurso para trabajar para la Universidad para la Paz de las Naciones Unidas en San José de Costa Rica, donde dirigió la Orquesta Sinfónica Nacional. Regresó a Italia, donde ha hecho múltiples trabajos.
