Temprano en la mañana de este miércoles, el parque central amaneció cerrado y custodiado por elementos Cobras, Policía Municipal y Ejercito.
Colocaron las barreras en los alrededores, pero no quitaron a los vendedores ambulantes qué están en la peatonal, los que son tatuadores.
Los vendedores se replegaron a la Catedral, pidieron que los dejen trabajar y llevar el sustento a sus familias.
Dijeron que son 50 los vendedores afectados. Quemaron llantas y pedazos de madera.
A eso de las 11:00 am, comenzaron a llover piedras. Según el alcalde, hay cuatro policías heridos.
Parque central sin vendedores
El martes, el parque central amaneció despejado de vendedores, lo que generó una lluvia de halagos para las autoridades municipales.
Cuatro horas más tarde la parte recuperada estaba de nuevo ocupada por carpas y puestos de ventas, tras un enfrentamiento de vendedores y policías municipales.
El gerente de Prevención, Seguridad y Movilidad Urbana, Carlos Flores, explica que se está haciendo el trabajo. En el caso de los puestos en el parque central las acciones se llevan a cabo por la emergencia del dengue, pero también por el reordenamiento. “Despejamos el costado sur del parque central Luis Alonso Baraona para mejoramiento en las áreas verdes, limpiar y ordenar”, dijo el gerente.