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“Es grato tener una cama”: Ingeniero rescatado de las calles

  • 25 diciembre 2022 /

Hoy, Ricardo Alfonso Rodríguez luce renovado tras vivir en la calle.

San Pedro Sula, Honduras.

Ricardo Alfonso Rodríguez (de 71 años) calificó como reconfortante su primera noche en una cama y bajo un techo, tras seis años de vivir en las calles.

Este ingeniero civil sampedrano fue rescatado el jueves por Mensajeros de la Paz Honduras, quienes buscan reinsertarlo en la sociedad. Luego de un trabajo de visitas fue transportado a las oficinas de esta institución en la colonia Altamira.

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Ahí recibió un baño, alimentos y el calor humano de sus excompañeros de colegio: Marco García y Raúl Morillo, así como del presidente de Mensajeros de la Paz, el médico José Jaar.

Para saber

Mensajeros de la Paz surgió en 1962 en la ciudad de Oviedo bajo el nombre de Cruz de los Ángeles, una iniciativa de dos jóvenes recién ordenados sacerdotes católicos: el padre Ángel García Rodríguez y el padre Ángel Silva. En ese entonces, estaba formado por un colectivo de personas movilizado por una especial sensibilidad social hacia el sector de la marginación infantil y juvenil. Estos jóvenes emprendieron una aventura destinada a la atención de niños carentes de hogar, a los que se les ofreció la posibilidad de vivir en un ambiente adecuado para favorecer su desarrollo.

La misma tarde del jueves fue llevado a su nuevo hogar, un cuarto propio en la casa del exfutbolista Roberto Herrera Moreno, conocido como Pica Herrera, quien le ayudará a rehabilitar sus piernas. Ahí tiene una cama de marco metálico con un colchón básico, cobijas, almohada, un andador y un ventilador.

LA PRENSA dio a conocer las condiciones en las que vivía rodeado de toldos, botellas viejas e insectos, y la forma en la que vivirá ahora es completamente distinta.

Rodríguez muestra su cultura al hablar y tuvo una exitosa carrera profesional participando en la construcción de carreteras y puentes, así como trabajos en diversas empresas y firmas; pero perdió la motivación de vida y cayó en las calles.

Luego de su rescate busca un trabajo donde colaborar con sus conocimientos; asimismo, es un amante de la lectura y la única maleta que tenía en su posesión está llena de libros. Este hombre nunca se casó ni tuvo hijos, pero espera poder dejar un legado hoy que tiene una nueva oportunidad.

“Es grato tener una cama”: Ingeniero rescatado de las calles