Roxana Araujo, ministra de Salud, inauguró ayer
la Unidad de cuidados intensivos (UCI) pediátrica del hospital Mario Rivas.
“Este proyecto se tiene pendiente desde hace cuatro años, pero por la falta de personal de enfermería y de equipo no se había echado a andar”, aseguró la ministra.
Anteriormente alrededor de 13 menores que necesitan estar conectados a respiradores artificiales permanecían con los pacientes de la sala de emergencia pediátrica, lo cual complicaba su cuadro clínico.
Son cuatro cupos los que se han habilitado en esa sala. Esperan en el transcurso del año abrir más entre
ocho y 10 espacios más. “Vinimos a supervisar lo que hace falta, la próxima semana ya tendremos todos los aparatos que hacen falta”, declaró. Juan Carlos Argueta, director del Mario Rivas, agradeció a Araujo, al grupo Todo por Amor, a la Fuerza Aérea y a Susana Prieto por ayudarles a montar la unidad. La funcionaria también aprovechó su visita para inspeccionar las áreas críticas del centro asistencial con el fin de identificar las necesidades prioritarias.
Sobre la “agónica espera” del presupuesto para Salud, contestó que la secretaría de Finanzas no ha hecho el desembolso de los fondos. Reconoció que es una pena que los pacientes tengan que comprar hasta las jeringas que se usan en algunos casos.
“Sabemos que los pacientes han tenido que comprar algunos medicamentos e insumos, pero estamos seguros que dentro de poco esta situación se va a revertir, para dar una mejor atención a las personas de escasos recursos económicos”.
Personal de limpieza y de vigilancia del Rivas detuvieron en varias ocasiones a Araujo para exigirle el pago de más de 10 meses de salario.
“Este es un servicio subrogado, en este momento se tiene todo listo en Finanzas y esperamos que suelten el dinero para poder pagarle a los proveedores y que esta gente humilde reciba la compensación de su trabajo”, respondió.
